El Sindicato de Inquilinos y la PAH ocupan la sede del PSC para pedir la limitación de los precios del alquiler
El Sindicato de Inquilinos y la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) han ocupado este lunes la sede del PSC de la calle Pallars en Barcelona. Ambas organizaciones sociales protestan por el real decreto que el Gobierno de Pedro Sánchez ha elaborado en materia de vivienda y en el que no se incluye la limitación del precio de los alquileres, una medida que defienden ambas organizaciones.
El portavoz del Sindicato de Inquilinos, Jaime Palomera, ha asegurado que una de las opciones que barajan es pasar la noche en la sede del PSC. Palomera pide al PSOE que muestre un “compromiso real” con la ciudadanía y a la vez exige a los socialistas catalanes que “den soluciones”.
El secretario de Organización del PSC, Salvador Illa, ha expresado su respeto por la ocupación y ha afirmado que no tienen “ningún inconveniente” con que se produzca esta protesta. “Nos han dicho que serán respetuosos con las instalaciones y que solo quieren hacer evidente la protesta. Si esto es así, no tenemos ningún inconveniente. Hasta ahora está siendo así. La política es esto”, ha expresado al salir al encuentro de los concentrados.
Tanto la PAH como el Sindicato de Inquilinos han reclamado al PSOE que cumpla su pacto con Podemos para regular los precios del alquiler. “Hay subidas muy abusivas porque la propiedad quiere asegurarse el negocio ante la tímida ampliación de los años de contrato que plantea el real decreto, provocando incluso subidas escalonadas que llegan hasta los 1.400 euros para compensar la ampliación de duración de los contratos”, defienden la PAH y el Sindicato.
La ley que se vota mañana en el Congreso de los Diputados no parece que vaya a prosperar, ya que el PP, Unidos Podemos y ERC votarán con toda probabilidad en contra. El decreto, elaborado por el departamento que dirige el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, recupera los contratos de alquiler de cinco años de duración -actualmente son vigentes durante tres años- y aumenta la prórroga tácita de uno a tres años.