Un millar de personas vuelven a manifestarse en Barcelona para pedir la libertad de Hasel

Un millar de personas, según cifras del Ayuntamiento de Barcelona, han salido de nuevo a la calle para pedir la libertad del rapero Pablo Hasel, encarcelado tras ser condenado a nueve meses de cárcel por un delito de apología del terrorismo e injurias a la corona. La concentración ha acabado con siete detenidos.

La manifestación de este domingo es la sexta seguida en la capital catalana, donde desde el pasado martes se han detenido a decenas de personas -más de 100 en toda Catalunya- en los graves disturbios generados cada noche al acabar las manifestaciones.

Los manifestantes han sido convocados en la estación de Sants, hasta donde se han desplazado numerosas patrullas de los Mossos que han revisado las pertenencias de muchos jóvenes que se acercaban a la estación. Tras sentarse en el suelo en un círculo y hacer un turno de intervenciones, los manifestantes han caminado hasta el centro de la ciudad. En una de las pancartas de los concentrados, más escasos que el sábado, se podía leer: “Nos habéis enseñado que ser pacíficos es inútil”.

Cuando los manifestantes han llegado a la jefatura de la Policía Nacional en Via Laietana, algunos han lanzado objetos y cubos de basura a los agentes desplegados frente al edificio, sin que hubiese habido cargas ni incidentes destacados cuando faltaban pocos minutos para las 21h. Poco rato después los Mossos han disuelto a los manifestantes y los han vuelto a empujar hacia el norte de la ciudad.

La policía catalana ha informado que al acabar la manifestación un grupo de violentos ha roto los cristales de una tienda de paseo de Gràcia y también se han encendido algunas barricadas en Rambla Catalunya, aunque los disturbios han sido de mucha menor gravedad que días anteriores.

En Girona, también 200 personas se han manifestado contra el encarcelamiento del rapero, cuyo caso ha abierto un debate sobre los límites a la libertad de expresión en todo el país. En Catalunya, los graves disturbios -que han supuesto la quema de centenares de contenedores y el saqueo de diversos comercios- también han puesto el foco sobre las actuaciones de los Mossos d'Esquadra, después de que una joven de 19 años perdiese el ojo el pasado martes, presumibilemente por el impacto de un proyectil de 'foam' de la policía catalana.