Catalunya obliga a los ancianos a presentar una PCR negativa de coronavirus antes de ingresar en una residencia
La Generalitat ha aprobado este domingo el plan para la 'nueva normalidad' en la residencias de ancianos y para personas con discapacidad. Se trata de un amplio abanico de recomendaciones y normas que deberán implantar las direcciones de los centros y los residentes, entre las que destaca la obligación de las personas que vayan a ingresar en una residencia a disponer de una prueba PCR negativa de coronavirus realizada como máximo cinco días antes.
El protocolo para las residencias, pendiente de publicarse en el Diari Oficial de la Generalitat (DOGC), es la segunda normativa sectorial que aprueba el Govern para la 'nueva normalidad' después de la de las discotecas. Pese a que ya ha recuperado todas las competencias centralizadas durante el estado de alarma, la Generalitat tiene pendiente aprobar más de una docena de planes sectoriales.
En un comunicado, la conselleria de Salud ha explicado que a partir de ahora los nuevos residentes deberán permanecer, tras presentar la PCR negativa, diez días en aislamiento en los centros. Además de la prueba PCR, los familiares deberán firmar una declaración responsable de que el nuevo residente no ha estado en contacto con ningún caso “sospechoso, probable o confirmado” de coronavirus en los últimos diez días, ha indicado la conselleria.
El plan también obliga a las residencias a categorizar sus espacios en función de los grupos de riesgo que acojan. La clasificación de salas y plantas se realizará mediante tres colores, y se crearán zonas verdes –para personas sin COVID-19–, zonas amarillas –para residentes sospechosos de infección o de haber estado en contacto con un enfermo del virus así como para las cuarentenas– y zonas rojas –para pacientes confirmados de coronavirus.
A su vez, cada centro será clasificado en verde –residencias libres de COVID-19 y correctamente sectorializada–, naranja –con paciente con coronavirus, pero debidamente controlados– o rojo –con brotes sin control. En las dos primeras se permitirán nuevos ingresos pero no en las residencias clasificadas en rojo.
Según el comunicado de Salud, el plan para las residencias del Govern también “propone” que todos los residentes y los trabajadores de los centros, salvo los casos ya confirmados, “sean objeto de control clínico y epidemiológico diario para incidir en una detección precoz” de la enfermedad, como por ejemplo el control de temperatura.
Respecto a las visitas de familiares, el plan de la Generalitat las autoriza para las residencias clasificadas de color verde y naranja y las veta a las rojas, salvo para “situaciones de final de vida”. Todas las visitas deberán estar autorizadas previamente por la dirección de los centros, que trasladarán a las familias las condiciones en que podrán verse con sus ancianos. Cada centró deberá establecer franjas horarias de visitas y un aforo máximo.
El plan del Govern recomienda una sola visita semanal por residente por un máximo de tres familiares. En las residencias que sea posible, el Govern recomienda habilitar un espacio para visitas exterior donde se puedan mantener las distancias de seguridad. También se recomiendan los paseos por la calle acompañados de familiares para reducir la circulación de visitas en los centros.
Sobre las salidas a la calle o con la familia de los residentes más autónomos, el plan indica que deberán hacerse con mascarilla y que el usuario o familia deberá firmar una declaración responsable. A la vuelta, el centro deberá desinfectar el calzado y/o silla de ruedas del residente, cuya ropa deberá cambiarse y lavarse a 60 grados. Si el residente se va con su familia más de tres semanas, a la vuelta deberá permanecer aislado.
El plan también propone que las residencias organicen a los usuarios en grupos de unas diez personas para reducir contagios y volver a celebrar actividades comunitarias y de grupo. Cada uno de estos grupos podrá compartir espacios comunes, como salas de estar o comedor o zonas de jardín o terraza.
1