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La entrega de los Premios Príncipe de Asturias se 'blinda' ante la llegada de las Marchas de la Dignidad
Asturias —
Los galardonados con los ocho premios Príncipe de Asturias 2014 reciben hoy esta distinción de manos del rey Felipe VI en medio de unas medidas de seguridad extremadas por el Ministerio del Interior ante la concentración en Oviedo de las Marchas de la Dignidad, que acuden a la llamada de la campaña de Somos Reales.
400 agentes antidisturbios, desplazados en Asturias, se encargan de frenar cualquier intento de reventar el acto de entrega de este reconocimiento internacional. En total, están concentrados unos 600 agentes entre antidisturbios, policía nacional, policía local, guardias civiles y servicio de información.
El diputado nacional de IU, Gaspar Llamazares, asegura que “este blindaje preventivo” anuncia por dónde va la Ley de Seguridad Ciudadana, “más por la seguridad de la élite, que por la de los ciudadanos. Anuncia la restricción de los derechos fundamentales, de la crítica y del derecho a la huelga”.
A su juicio, todo este despliegue forma parte de las nuevas señas de identidad de la restauración monárquica, caracterizada “por un lado, por esta obsesión por la seguridad y por otro, una monarquía de baja intensidad, con poca ética y una gestión gris”.
Las alarmas están encendidas. El alcalde de Oviedo, el popular Agustín Iglesias Caunedo, ha expresado la preocupación que hay en la Delegación del Gobierno en Asturias, ante una concentración que “trae gente de fuera”, entre la que, a su juicio “se cuelan antisistemas”, que “vienen a reventar actos públicos”.
Tanto los dirigentes asturianos de Izquierda Unida como los de Podemos respaldan con su presencia las protestas. Juan Carlos Monedero se encuentra en Oviedo para apoyar las marchas. Las primeras columnas asturianas, formadas por unas 300 personas procedentes de distintos ayuntamientos, llegan a Oviedo al mismo tiempo que lo hace Sofia de Grecia. Critican la “criminalización” que se hace de esta protesta pacífica.
Los manifestantes tienen permiso para concentrarse en una zona denominada La Losa, un punto alejado a la ceremonia de entrega, por donde no pasa la comitiva y es fácil de controlar por la seguridad. La protesta de las Marchas de la Dignidad no está autorizada para acudir hasta La Escandalera, ubicada frente al Teatro Campoamor. Los únicos que pueden hacerlo son los trabajadores de Liberbank, autorizados por el Tribunal Superior de Justicia de Asturias.
IU se ha convertido en el anfitrión de las marchas, que, a su juicio, “demuestran la situación de precariedad en la que vive la sociedad española y el hastío hacia el régimen. El senador Jesús Iglesias asegura que esta manifestación, no sólo pretende sacar de la invisibilidad a millones de personas, sino que ”supone también la exigencia inexcusable de pan, techo y trabajo“.
De momento, los actos programados por la Fundación Príncipe de Asturias se han desarrollado sin altercados. Los galardonados ya tienen su foto de familia con los reyes y han recibido de manos de Felipe VI la insignia acreditativa.
