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La crisis con Rusia obliga a Tenneco a mantener abierta la factoría de Gijón
Asturias —
Un twitter emocionado del comisario europea de Industria, Antonio Tajani, anuncia en la mañana del martes que la multinacional norteamericana mantendrá la factoría de amortiguadores en Asturias. “Prometí actuar y hoy anuncio que CEO mundial de Tenneco me ha presentado en Roma una propuesta para evitar el cierre de la fábrica de Gijón”, reza en su escrito.
El escenario internacional, la crisis del Este y las malas relaciones que están atravesando Estados Unidos y Europa con Rusia son el telón de fondo de que Tenneco considere reabrir y volver a la planta gijonesa. Un representante del comité de empresa reconoce que la empresa lleva meses equivocándose en sus decisiones, “no sólo con el cierre de Gijón”.
El conflicto con Ucrania ha sacado a la luz la fragilidad de entendimiento con Vladimir Putin. Antes de la crisis de Crimea, Europa ya se había posicionado en contra de algunos tratados con Rusia y ahora, con Estados Unidos involucrado, la presión de las sanciones europeas hacia el país del Este crece. Este enfrentamiento, ha cogido en medio a la multinacional norteamericana en pleno traslado a Rusia de sus intereses.
El portavoz asturiano de CCOO en Tenecco está convencido que la situación a nivel mundial ha influido en la decisión de dar marcha atrás en sus planes y del regreso del capital a la planta de Gijón. Pero a los 216 trabajadores asturianos lo que importa es que, después de ocho meses de batallas judiciales y movilizaciones, los directivos se han comprometido a mantener abierta la fábrica.
A partir de este anuncio, cada cual se hace eco del éxito de la hazaña. La empresa no quiere dar la imagen de que ha cedido y plantea reducir el tamaño y número de trabajadores mediante prejubilaciones y voluntarios para incorporarse a otras fábricas, con el propósito de venderla en un plazo máximo de dos años. Para los representantes sindicales la planta de Gijón “es la joya de la corona” de Tenneco y hablar de dos años en las actuales circunstancias es mucho tiempo. Y más, cuando tiene pendiente una resolución de Europa contra la multinacional por las leyes de anticompetencia.
El comisario y vicepresidente de la Comisión Europea, que estuvo muy involucrado en las conversaciones con la dirección de la multinacional, lo ha vendido como un triunfo casi personal, aunque entiende que la propuesta tiene que ser discutida en detalle con los representantes de los trabajadores y las autoridades autonómicas y españolas. “Pero para mí, constituye un paso muy significativo en la buena dirección”, dice en un comunicado Antonio Tajani
El presidente del Gobierno del Principado, Javier Fernández, agradece públicamente al comisario europeo “la labor que está desarrollando para desbloquear la situación de la fábrica gijonesa, aunque reconoce que ”queda trabajo por delante para lograr la viabilidad y la consolidación de la empresa en la dimensión que corresponda“.
El jefe del ejecutivo asturiano y los representantes sindicales tienen previsto reunirse en breve con el jefe de Gabinete del comisario, el asturiano Diego Canga, que ha tenido una participación muy activa en el proceso, para conocer con precisión el principio de acuerdo que plantea la dirección de Tenneco.
Al igual que las autoridades autonómicas, los representantes sindicales no conocen al detalle la nueva propuesta de la multinacional y esperarán a la reunión con Diego Canga para hacer una valoración. El cálculo de las autoridades comunitarias es que la planta de Gijón se reabra en un plazo de dos semanas.
La noticia sobre los nuevos planes de la multinacional, llega después de que los trabajadores presentaran el pasado viernes ante el Tribunal Superior de Justicia de Asturias un escrito de impugnación contra el recurso de reposición interpuesto por la multinacional frente a la sentencia del alto tribunal que le obliga a readmitir a toda la plantilla, despedida por carta en la Nochebuena de 2013.
Los trabajadores piden al Tribunal Superior que la dirección de la empresa acate cuanto antes la sentencia, que declaró nulo el despido colectivo, y readmita a la plantilla para retomar la actividad en las instalaciones gijonesas. De hecho, desde que comenzó el conflicto hace ocho meses, los empleados nunca abandonaron sus puestos y mantienen operativa la maquinaria para evitar que quede en desuso.
