El Liceu abre sus espacios privados con el nuevo ciclo de música de cámara

Cuatro conciertos de cámara en espacios privados del Liceu que normalmente no se abren al público conformarán la primera edición de “Las Cámaras del Liceu”, el nuevo ciclo estable de música de cámara que se inaugurará en la Sala Coro del Gran Teatre del Liceu el próximo 23 de noviembre.

Con motivo del veinte aniversario de la reapertura del Liceu, el director musical, Josep Pons, ha puesto en marcha un proyecto largamente acariciado, que permitirá a los músicos del Coro y de la Orquesta Sinfónica ganar visibilidad.

Los cuatro conciertos se celebrarán en los lugares donde “se cocina la música” y en espacios selectos y privados del Liceu, como la Sala del Coro, la Sala Mestre Cabanes y el Foyer, según ha explicado hoy Pons.

Un cuarteto de cuerda, formado por dos violines, una viola y un violoncelo de la Orquesta Sinfónica del Liceu, abrirá el ciclo con dos piezas de Beethoven y Chaikovski.

El segundo concierto será el del coro de mujeres del Liceu que, bajo el título de Voces Blancas y los Caminos hacia Wagner, interpretará un programa centrado en Wagner el 18 de enero.

El 22 de febrero, la sección de metales de la Orquesta del Liceu, que se ha constituido en grupo bajo el nombre Liceu Brass Ensemble, se presentará en sociedad dirigida por el especialista en instrumentos de metal Ian Bousfield.

Cerrará el ciclo “El mundo de ayer: la culminación de Europa”, con una formación más amplia y un programa diseñado alrededor de la figura Wagner, el 31 de mayo.

Todos los conciertos tendrán un precio asequible, serán de una hora de duración e irán acompañados de breves comentarios para facilitar “el acercamiento de todo el mundo”.

Pons ha aclarado que este ciclo forma parte del proyecto que presentó cuando entró en el Liceu en 2012 y cuya puesta en marcha se ralentizó por la crisis económica.

El director musical se ha mostrado muy satisfecho de que el proyecto se reactive y ha anunciado que próximamente resucitarán otros puntos del mismo, como la creación de grupos de cámara estables, la convocatoria de plazas y el refuerzo de la temporada sinfónica propia.

Pons ha agradecido a la nueva dirección que haya decidido impulsar este ciclo, pero ha recordado que el anterior director, Roger Guasch, ya “puso el semáforo en verde antes de marchar, después de mucho tiempo con el semáforo en rojo”.

Respecto al último cambio en la dirección, el anuncio de la marcha de la directora artística, Christina Sheppelmann, Pons no ha querido valorar la decisión, pero ha señalado que “son cosas de la vida, todos tenemos fecha de caducidad y lo sabemos cuando firmamos el contrato”.