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Las Corts aceleran la tramitación de dos leyes clave del departamento de Mónica Oltra

Pleno de las Corts valencianas

Laura Martínez

En septiembre el reloj parlamentario comenzará a correr más rápido. Último curso, última oportunidad para cumplir las promesas electorales y los puntos del Pacto del Botánico que aún quedan. Vistos los ritmos y las ajustadas mayorías -esta pasada semana se quedó sin aprobar la modificación del Consell Audiovisual por la ausencia de cinco diputados- no todas las leyes que quedan pendientes tienen posibilidades de salir adelante. Así que los grupos parlamentarios se han puesto a priorizar.

Después del parón estival y del debate de política general, en el que los partidos se 'mojarán' con una docena de propuestas por grupo, hasta el pleno que apruebe los presupuestos de la Generalitat para el último año se intentarán agilizar algunas normativas clave. Entre ellas, los dos últimos proyectos de ley de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas, departamento que dirige Mónica Oltra: la ley de Infancia y Adolescencia y la de Servicios Sociales Inclusivos.

Ambas normativas tienen un calado importante: la primera, aparte de empoderar a niños y jóvenes en la toma de decisiones, especifica que en caso de violencia familiar debe ser el maltratador quien abandone el hogar, no las víctimas, entre las que se encuentran los niños; la segunda reorganiza todo el sistema de servicios sociales y asistenciales, abandonando el modelo 'Blasco-Cotino' y reduciendo la burocracia. Esta última busca una atención más próxima, dotando de recursos a los ayuntamientos y “con políticas de proximidad y equipos de base que puedan trabajar desde la prevención y con servicios y prestaciones de primer orden”. También se quiere aprobar cuanto antes la Ley LGTBi, cuyo proyecto se aprobó el mes pasado y que sanciona hasta con 45.000 euros las terapias contra la homosexualidad.

Entre las leyes que emanan de las Corts Valencianes, los diputados quieren acabar con el atasco de la ley electoral, que cuatro de los cinco grupos llevaban en el programa con el que concurrieron a los comicios. Podemos y Ciudadanos están a la búsqueda de un acuerdo de mínimos para desbloquear la reforma que permita bajar la barrera del 5% al 3%, entre otras cuestiones. Sin el apoyo de PP o Ciudadanos, el acuerdo de mínimos no puede salir adelante.

Siguiendo el orden de prioridades, desde la Cámara parlamentaria quiere retomarse la ley de mancomunidades, que busca potenciar esta división territorial en detrimento de las provincias y elimina la comarca de l'Horta Oest, que incluye poblaciones como Xirivella, Manises, Alaquàs o Picanya, más identificadas con l'Horta Sud, según el centro de estudios cartográficos. El texto definirá el régimen jurídico que regule la creación, los órganos de gobierno, las normas de organización y funcionamiento y el procedimiento para su supresión. Además, se debatirá a principios de curso la reforma de la Ley de Ordenación del Territorio (Lotub) y la de expresidentes.

Por su parte, desde Podemos quieren potenciar la ley de Cambio Climático y la agencia que se aprobó a finales del pasado año, como una enmienda a los presupuestos de la Generalitat. Entre las obligaciones del ente, que debería estar adscrito a Presidencia, estará elaborar la estrategia valenciana contra el cambio climático, realizar informes “con datos fiables” para toma de decisiones y tener un registro de los datos sobre el cambio climático en la Comunitat Valenciana, así como redactar un plan permanente de “alfabetización climática” de la sociedad.

La formación morada buscará presionar al Ejecutivo con iniciativas sobre el parque público de vivienda, la gestión de residuos, y el plan contra economía sumergida, ya que considera que no se ha trabajado lo suficiente en estas cuestiones.

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