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Así será la ciudad deportiva del Levante UD que revitalazará la fachada marítima de Nazaret

Imagen virtual de la ciudad deportiva del Levante U.D.

Carlos Navarro Castelló

El presidente del Levante U.D., Quico Catalán, presentó este lunes por la noche el proyecto de la futura ciudad deportiva que el club granota construirá en Nazaret, en un acto en el que también participó el alcalde de València, Joan Ribó y el presidente del Consell, Ximo Puig.

Según explicó, en las próximas semanas el Levante UD iniciará la tramitación para la solicitud de la concesión a la Autoridad Portuaria de Valencia para construir el equipamiento y espera iniciar las obras a lo largo de 2019.

Después de más de seis años desde que se iniciaron las primeras gestiones, el ilusionante proyecto de la nueva ciudad deportiva del Levante UD que transformará la fachada marítima de Nazaret en una gran zona verde y deportiva ya está en marcha.

Con este proyecto, el Levante UD pretende disponer de un complejo de primer nivel orientado al alto rendimiento deportivo de nuestros equipos permitiendo una mayor calidad y tecnificación en todos los aspectos de su preparación, dar un impulso a la cantera posicionándola entre las mejores a nivel nacional y ser un referente en los aspectos educativos que complementan la formación de los jugadores y jugadoras.

Además, se va a incorporar y asumir el concepto de sostenibilidad medioambiental tanto en su diseño como en su uso posterior; todo ello sin duda tendrá un impacto positivo en un espacio geográfico vinculado al origen del club.

En el próximo mes de septiembre el club tiene la intención de hacer público el proyecto definitivo tan importante para el futuro del levantinismo.

Catalán agradeció al Ayuntamiento de Valencia y a la Generalitat Valenciana el interés mostrado para que este proyecto se haga realidad; así como a los servicios técnicos de la Autoridad Portuaria de Valencia por su colaboración.

Como avanzó eldiario.es, la ciudad deportiva contará con siete campos de fútbol (uno para la práctica de rugby), un pabellón cubierto para entre 2.500 y 3.000 espectadores y una residencia para la escuela con capacidad para 100 jugadores.

Además el edificio abandonado de Benimar se rehabilitará y acogerá varias oficinas del club granota, pero también parte de las oficinas de la Fundación Deportiva Municipal.

La Ciudad Deportiva será abierta, careciendo de muros o vallados, y estará integrada en el barrio de Natzaret mediante zonas verdes. Habrá precios ventajosos para el uso de las instalaciones por parte de los vecinos de la zona.

El proyecto se asentará sobre una superficie de 99.000 metros cuadrados y la inversión estimada será en torno a los 11-14 millones de euros con un plazo aproximado de construcción de 18 meses.

Al respecto, el alcalde de València, Joan Ribó, comentó que “la coyuntura que convierte este sueño en proyecto social y urbanístico es la necesidad de dar una solución definitiva al final del antiguo cauce del Turia, actual Jardín del Turia, a su llegada al mar. Se recuperaría así para la ciudadanía las antiguas concesiones portuarias de Benimar y Moyresa, para destinarlas a un gran Parque de Desembocadura y una gran instalación deportiva que configura la transición entre la ciudad y el puerto”.

Ribó añadió que “la construcción de esta gran instalación deportiva redundaría en una intensa revitalización social y económica de Nazaret y además, superaríamos el aislamiento del barrio, tanto por lo que respecta a la conexión de los transportes públicos, como por la inaplazable necesidad de soterramiento de la línea de ferrocarril que aún hoy separa Nazaret del resto de la ciudad”.

Los vecinos, satisfechos

Por su parte, los portavoces de las asociaciones de vecinos de Nazaret y Nazaret Unido se han mostrado satisfechos por el proyecto, ya que contribuirá a dinamizar y recuperar una zona que actualmente está muy degradada y además seupondrá un colchón verde que amortiguará la actividad del puerto en el barrio.

Ambos dirigentes vecinales han pedido que se tenga en cuenta la contratación de personas paradas del barrio para la ejecución de las obras, que se mantenga el nombre del edificio de Benimal para preservar la memoria de la antigua playa y sobre todo que la ejecución del proyecto vaya acompañado de la puesta en marcha de la línea 10 de tranvía (antes línea T-2) y su conexión con el Canyamelar, de forma que estarían conectados por transporte público el estadio Ciudad de València y la ciudad deportiva.

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