La mujer de Luis Pineda, el puente entre Ausbanc y el poder político
Luis Pineda viajaba en tren desde Sevilla consciente de que la policía le estaba esperando en Madrid. Ya habían detenido al secretario general de Manos Limpias, Miguel Bernad. Pineda aguardó su detención tuiteando, antes de que el tren en el que viajaba llegase a la estación de Atocha, donde los agentes de la UDEF le detuvieron en el marco de la operación Nelson. Pero los policías no solo le pusieron las esposas a él, también arrestaron a su mujer.
María Teresa Cuadrado es un personaje fundamental en la turbia historia de Ausbanc. Desde su dirección dio el salto al otro lado, a la administración, ocupando un cargo directivo de la Comunidad de Madrid bajo la presidencia de Alberto Ruiz-Gallardón. Allí tejió una red de contactos que ayudaría a la expansión de Ausbanc. Un juez investiga ahora las subvenciones del Gobierno regional a la asociación otorgadas después de que Cuadrado abandonase su cargo.
Ausbanc, la Asociación de Usuarios de Servicios Bancarios, se fundó en 1986. Junto a Pineda y su mujer, dos socios más han comandado el proyecto: Alfonso Solé, tesorero de la asociación, y María Manuela Mateos, que ejercía como directora jurídica. Su objetivo declarado era el de defender los intereses de los usuarios de bancos. Todos han acabado detenidos en la operación Nelson.
Cuadrado ha actuado como abogada en los diversos frentes que ha ido abriendo Ausbanc contra los bancos. En concreto, Pineda le atribuye uno de los éxitos más importantes de la asociación, la eliminación del redondeo al alza en los intereses de los préstamos hipotecarios, una batalla judicial de una década que el Tribunal Supremo cerró en 2013.
De Ausbanc a la dirección general de Consumo
Tras pasar varios años pleiteando en nombre de la asociación, Cuadrado saltó a la administración de la mano del PP. El propio Pineda intentó justificar su fichaje ante las sorpresa de la prensa. “Es una abogada brillantísima, mucho más que yo”, explicaba en una entrevista. En esa misma entrevista recordó que su mujer había trabajado anteriormente con Luis Blázquez, el consejero de Economía que se la llevó al Gobierno de la Comunidad de Madrid con el cargo de directora general de Consumo.
Luis Blázquez siempre ha estado ligado a cargos de responsabilidad con el PP. Fue consejero y vicepresidente segundo de la Comunidad de Madrid con Gallardón. Ocupó la presidencia de Mercamadrid entre 2003 y 2014, la época en la que el mercado mayorista vivió algunos de los desmanes que hoy se investigan. También mantenía buenas relaciones con el sector empresarial tras haberse sentado en los consejos de administración de diversas compañías y bancos.
El paso de Cuadrado por la administración madrileña supuso un espaldarazo para Ausbanc. Según explica el periodista Íñigo de Barrón, que una socia ocupase un cargo de responsabilidad en la Comunidad de Madrid permitió a Ausbanc ampliar “enormemente su capacidad de actuación e influencia, ya que contaba con otro elemento de presión”.
Su desempeño como directora general de Consumo estuvo manchado por la polémica. Desde ese puesto, era la encargada de regular y supervisar las empresas de bienes tangibles en Madrid, como Fórum y Afinsa. En 2006 se destapó la estafa gestada por estas dos empresas, mediante un esquema piramidal basado en las inversiones en sellos.
Según recoge El Economista, Consumo, bajo la dirección de Cuadrado, “nunca requirió a las compañías para que dejaran de utilizar términos financieros y tampoco les exigió nunca que enviaran las auditorías”. En 2007, un juez comenzó a investigar los pagos de Fórum y Afinsa a Ausbanc, estimados en cerca de 1,2 millones de euros.
Las polémicas subvenciones a Ausbanc
María Teresa Cuadrado dejó la dirección general en 2003 y se reincorporó a Ausbanc, encabezando su delegación de Madrid y convirtiéndose en su representante ante el Consejo de Consumo de la Comunidad de Madrid. Un año después, en 2004, ya con Esperanza Aguirre al frente del Gobierno regional, Ausbanc recibió una subvención de más de 300.000 euros por parte de la Consejería de Empleo y Mujer, destinada a asociaciones con un fin distinto a la defensa de usuarios de la banca.
En 2008, con la actual presidenta de la Asamblea de Madrid, Paloma Adrados, como consejera, recibió otra ayuda pública de 447.567 euros, que venían en parte del Fondo Social Europeo. El juez Santiago Pedraz ha cuestionado que la asociación cumpliese los requisitos para recibir subvenciones por un total de 757.341 euros por parte de la Comunidad de Madrid.
Entre quienes llevan años denunciando las extorsiones de Ausbanc está Javier López, el presidente de Credit Services, quien ha señalado a Cuadrado como la responsable de conseguir las subvenciones y los apoyos para la asociación. Su influencia política a favor de Ausbanc también ha sido denunciada por las organizaciones de consumidores rivales.
Ausbanc fue excluida del Registro Estatal de Asociaciones de Consumidores en 2005, pero logró volver en 2013, con el Ejecutivo de Mariano Rajoy en la Moncloa. Volvió a ser expulsada en 2014. Durante todo ese tiempo se mantuvo en el registro de asociaciones de la Comunidad de Madrid, y solo ahora se ha planteado su expulsión. Las asociaciones y organizaciones de consumidores enfrentadas a Ausbanc siempre han señalado a María Teresa Cuadrado como la responsable de las buenas relaciones de la asociación con el poder político madrileño.
