La mayoría de los españoles respalda la medida temporal de limitar al 2% la subida de los alquileres

Desligar la subida de los alquileres del pico histórico de inflación, situada en el 9,8%. El Gobierno aprobó a finales de marzo una limitación temporal de la revalorización de las rentas que los inquilinos pagan por sus inmuebles, fijando un tope del 2%. Una medida que forma parte del plan de choque para hacer frente a los efectos económicos de la guerra en Ucrania y que cuenta con el respaldo de una mayoría de ciudadanos, sobre todo de los votantes de izquierda.

Así lo refleja la encuesta realizada por Simple Lógica para elDiario.es. Este análisis recoge que un 55% de los ciudadanos está a favor de esta limitación que, en principio, durará tres meses.

En concreto, un 27% de los encuestados dice estar “muy de acuerdo” con esta medida, que la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, calificó como un mensaje para enfocar la vivienda como “un derecho fundamental”. “Pagar la renta, a veces, resulta imposible”, aseguró al presentar el plan de choque tras el Consejo de Ministros del pasado 29 de marzo.

En el análisis realizado por Simple Lógica, otro 28% de los encuestados contesta estar “bastante de acuerdo” cuando se le pregunta “¿hasta qué punto está usted de acuerdo con la medida que se ha decidido de limitar la subida de los alquileres a un 2%?”. 

En cambio, un 39% de los ciudadanos encuestados está en contra de poner en marcha esta limitación. En detalle, un 18% afirma sentirse “bastante en desacuerdo” y otro 21% “muy en desacuerdo”. Solo el 7% de las opiniones que refleja el análisis de Simple Lógica no se decanta por respaldar o rechazar el tope del 2%. 

Diferencias por partidos políticos

El límite temporal a la subida de los precios del alquiler concentra un respaldo significativamente mayor entre los votantes de izquierda. El 81% de los encuestados que se declaran votantes de Unidas Podemos están a favor de esta medida, bien muy de acuerdo (54%), bien bastante de acuerdo (27%); y solo un 7% de los votantes de la formación morada asegura estar muy en desacuerdo.

En el caso de quienes votan al PSOE, la encuesta pone de manifiesto que suscriben el límite de las subidas de rentas de alquiler un 68% de sus votantes. Dentro de ese porcentaje, un 31% está muy a favor.

En cambio, cuando se trata de votantes del PP, Vox y Cs, más de la mitad de quienes respaldan a estas tres formaciones están en contra de limitar la subida de los alquileres y desligarlos de la inflación. 

El mayor rechazo, entre los votantes del PP, con un 65%. En el caso de la formación presidida por Alberto Núñez Feijoó, está de acuerdo con la medida el 30% de sus votantes. 

Mientras, un 63% de los votantes de Vox se oponen y lo mismo sucede con el 51% de los encuestados votantes de Cs. En el caso de estas dos formaciones, respaldan esta decisión del Gobierno un 30% y un 41% de sus votantes, respectivamente.

Una limitación temporal a dos velocidades

La medida puesta en marcha por el Ejecutivo a finales de marzo limita el alza de los alquileres que tengan que revisarse antes del 30 de junio al 2%, de forma que queda vinculado al Índice General de Competitividad (IGC). Pero marca dos velocidades diferentes en función de si quien posee el inmueble en alquiler es un pequeño propietario o un gran tenedor. 

Estos últimos quedan definidos en el decreto de medidas para hacer frente al impacto de la guerra en Ucrania como aquellas personas físicas y jurídicas que tienen más de 10 inmuebles en propiedad o poseen una cantidad menor pero superan los 1.500 metros cuadrados de superficie, excluyendo garajes y trasteros. Estos grandes propietarios, sean personas, empresas o fondos, no podrán subir los alquileres más de un 2%, hasta el citado 30 de junio. En cambio, si se trata de pequeños propietarios, sí pueden negociar una subida superior al 2% pero, si no hay acuerdo entre dueño e inquilino, esa subida tiene como techo el 2%, el tope que marca el IGC. 

La mayoría de contratos de alquiler ligan su actualización anual al IPC general, que es el máximo al que se puede revisar al alza la renta de una vivienda y que en marzo alcanzó máximos de 40 años, situándose en el 9,8%. También puede estar ligado al IPC del alquiler de vivienda, que calcula el Instituto Nacional de Estadística (INE) y que apenas se ha tensionado; o al mismo IGC, que ahora se toma como referencia y que está topado en un 2%.