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Los trabajadores realizaron 11,6 millones de horas ilegales cada semana en 2013

Crecen las horas ilegales que hacen los trabajadores. EUROPA PRESS

Ana Requena Aguilar

Madrid —

En 2013, los trabajadores realizaron 11,6 millones de horas ilegales a la semana, es decir, que sobrepasan la jornada legal de 42 horas semanales (40 ordinarias y 2 extraordinarias). Un exceso de trabajo con impacto en los propios trabajadores, pero también en el mercado laboral y en las arcas del Estado: con estas horas podrían haberse creado 326.838 puestos de trabajo y la Seguridad Social hubiera ingresado unos 3.000 millones más de lo que lo hizo, según un informe de Comisiones Obreras basado en datos del Instituto Nacional de Estadística.

El sindicato explica que todas las horas que exceden de las 42 semanales son horas ilegales, estén o no retribuidas. “Una cosa son las horas extraordinarias, que solo pueden ser ochenta horas anuales, y otra cosa son las horas ilegales. Toda aquella jornada que habitualmente supere las 42 horas estará al margen de lo establecido”, dice el informe. CCOO subraya que con una tasa de paro del 26% debe exigirse solidaridad en la distribución del tiempo de trabajo y más inspección y control para evitar horas ilegales.

Desde que comenzó la crisis, el peso de las horas ilegales ha ido disminuyendo: en 2007 suponían el 22,9% mientras que en 2012 ya había bajado hasta el 15,9%. Sin embargo, esta tendencia cambió en 2013, cuando volvieron a repuntar hasta el 16,05%.

La Seguridad Social, con unas arcas especialmente mermadas, es una de las perjudicadas: las cotizaciones que dejó de ingresar en 2013 a causa de estas horas ilegales suponen una minoración del 3,5% de sus ingresos. Visto de otra forma, la Seguridad Social dejó de recaudar alrededor de 2.842 millones de euros. También Hacienda dejó de ingresar por los salarios no percibidos: 1.242 millones si se tiene en cuenta el tipo impositivo medio.

CCOO también ha calculado en qué medida podría haberse beneficiado el mercado laboral si estas horas se hubieran convertido en empleos: estiman que se hubieran creado 326.838 puestos de trabajo de una jornada media de 35,4 horas y el paro se habría reducido en un 5,5%.

El sector servicios, el que más población ocupa, es también en el que más horas ilegales se hacen: ocho millones y medio, lo que habría permitido, según el sindicato, que casi 250.000 personas hubieran trabajado con una jornada media de 34 horas.

La mayoría de las horas ilegales (el 50,2%) fueron realizadas por trabajadores de entre 30 y 44 años, especialmente por hombres (el 37,4%). El 25% las hicieron empleados de entre 44 y 54 años: el 7% de ellas las realizaron mujeres frente al 18,5% de los hombres. Los asalariados de menores de 30 y mayores de 55 se reparten el 25% restante de horas ilegales.

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