En busca de un nuevo paradigma para el futuro de la alimentación
Según el Estudio de Perspectivas Agrícolas realizado el pasado año por la OCDE en colaboración con la Organización de las Naciones Unidas para Alimentación y la Agricultura (FAO), la demanda mundial de alimentos continuará en un crecimiento sostenido durante la próxima década. Así, la demanda de productos agrícolas aumentará un 15% hasta 2028, especialmente empujada por las regiones con un alto crecimiento demográfico. Se prevé, no obstante, que la mejora de la productividad agrícola permita un crecimiento paralelo de la oferta alimentaria. En consecuencia, tal y como se desprende de este estudio, el comercio internacional de productos alimentarios aumentará, resultando una actividad esencial para la garantía de la seguridad alimentaria a nivel global.
Para responder a este aumento constante de la demanda de alimentos a escala internacional, la innovación, la investigación y el desarrollo desempeñarán un papel clave y, en este sentido, las instituciones públicas y las empresas privadas del sector agroalimentario ostentan la responsabilidad de dirigir sus esfuerzos hacia una mejora de la productividad.
Un consumidor cada vez más concienciado y exigente
Un estudio llevado a cabo por EY en 2016, el EY CPR Balance Executive Survey, ya apuntaba que el 80% de los líderes de las empresas del sector consideraban complicado innovar al ritmo al que cambiaban los gustos y necesidades de los consumidores, especialmente en una época, la actual, en la que las tendencias de consumo son mucho más fluidas que en épocas anteriores. No obstante, si bien la pandemia ha acelerado todavía más esa modificación de tendencias, se consolidan una serie de preferencias de consumo de carácter más constante a las que las empresas del sector agroalimentario se han ido adaptando para dar respuesta a un consumidor cada vez más concienciado y exigente.
Para Gabriel Torres Pascual, director de Innovación de Pascual y miembro de la tercera generación de la familia Pascual, “hay dos tendencias de consumo muy claras que se asientan en medio de una profunda evolución del sector: las preferencias hacia lo saludable y lo sostenible, que sin duda marcarán el consumo alimentario en los próximos años”. En este sentido, subraya: “conocemos un dato de gran interés que ilustra fielmente las nuevas prioridades de los consumidores, hasta un 73% de ellos estarían dispuestos a modificar sus hábitos de consumo con el fin de reducir su impacto medioambiental”.
Ante esta realidad, las empresas del sector comienzan a proyectar sus esfuerzos hacia estas dos tendencias protagonistas y, tal y como ha ocurrido históricamente, las compañías innovadoras que consigan escuchar activamente al consumidor y adaptarse a sus preferencias son las que lograrán reafirmar su posición dentro del mercado, respondiendo a la tradicional máxima empresarial de ‘adaptarse o morir’.
La innovación colaborativa como motor de la alimentación del futuro: el nacimiento de Pascual Innoventures
Desde hace más de cinco décadas, Pascual ha representado uno de los catalizadores de la innovación alimentaria en España. Con esta cualidad integrada en su ADN corporativo, la compañía fue la primera en introducir la uperisación y el envasado en brik en España, revolucionando el sector lácteo desde sus inicios. Desde entonces, ha continuado alcanzando hitos en torno a la calidad, la sostenibilidad y la innovación de sus productos, siendo el primer productor de España en certificar todas sus granjas con el sello AENOR de Bienestar Animal; lanzando el brik de leche más sostenible del mercado; creando con su marca Bifrutas una nueva categoría de productos a base de zumo y leche o introduciendo, con Vivesoy, las bebidas vegetales en el mercado de gran consumo.
Siempre persiguiendo el propósito de dar lo mejor para el futuro de la alimentación, las señas de identidad de esta empresa familiar siempre han sido la innovación y el emprendimiento. Con estos dos valores como estandarte, ahora, la tercera generación de la familia toma el testigo lanzando Pascual Innoventures, una sociedad independiente del negocio core, que va a permitir continuar imaginando el futuro del sector y de la alimentación en su conjunto.
Pascual Innoventures es una plataforma para la innovación colaborativa en el sector alimentario, que trabaja de manera autónoma, más ágil, pero comparte la misma visión y valores que la compañía.
Uno de sus grandes objetivos es anticiparse a las necesidades globales alimentarias, a través de la innovación, y crear las empresas del futuro. Todo ello forjando alianzas con startups que compartan la misma filosofía y propósito que el negocio actual de la familia.
Inventar e invertir, un valor diferencial
Pascual Innoventures nace con la misión de ayudar a startups en fase de early stage a desarrollarse para crecer juntos. Pascual Innoventures, por tanto, se convierte no solo en un vehículo de inversión, sino en el partner acelerador que los va a acompañar en todo el proceso, desde el desarrollo de la idea o negocio, hasta la misma búsqueda de otros inversores. Se trata de una manera diferente de hacer Corporate Venture Capital, anclada en el propósito.
Así, las startups seleccionados estarán ligadas con la actividad de Pascual y responderán a un propósito y unos valores compartidos, operando en los territorios donde la compañía se posiciona; tomando como referencia algunos de los principales consumer drivers para su crecimiento futuro. Desde la sostenibilidad, la economía circular, el bienestar animal, la salud; hasta la personalización y la entrada en nuevos canales para llegar al consumidor. Es decir, se trata de generar valor compartido que les permita crear las futuras empresas de Pascual.
Por otro lado, además de invertir, el objetivo es también “inventar”. Innoventures ha desarrollado las herramientas y procesos necesarios para crear sus propias startups, con su propia financiación, sociedad, equipo de trabajo y forma de trabajar, independiente del negocio.