Mérida incumple el ajuste y prorroga el presupuesto a la espera de las indicaciones del Ministerio
La portavoz municipal, Carmen Yáñez, ha explicado hoy en una rueda de prensa que el principal motivo para no aprobar un Presupuesto propio es que el pasado día 11 se recibió un requerimiento del Ministerio sobre el incumplimiento del Plan de Ajuste que aprobó el anterior Ejecutivo local para modificar el plazo de pago de la deuda a proveedores.
Se está, ha explicado, “en la tesitura de que hasta que el Ministerio no informe y marque los parámetros de ajuste, no se podrá trabajar sobre el Presupuesto con la ciudadanía y con los grupos de la oposición”.
Ha añadido que se han recogido más de cien propuestas de los emeritenses sobre las próximas cuentas.
A su juicio, no se ha podido avanzar en esta cuestión por cuestiones “burocráticas” y se tendrá que esperar a la “guía” de Hacienda para hacer las nuevas cuentas y que no se penalice al Ayuntamiento.
Para Yáñez, los objetivos y parámetros incumplidos del Plan de Ajuste se deben “fundamentalmente” al pago medio a proveedores.
Ley de Estabilidad Presupuestaria impone la obligatoriedad de que no sea superior a 60 días, pero el documento de Ajuste recogía 45 días el periodo medio de pago a proveedores, algo que se ha incumplido y se ha superado sobre todo en el segundo semestre, según ha explicado.
Esto es debido a que en el primer semestre del año “para obtener mejores datos” gran parte de la facturación del periodo se produjo pasadas las elecciones municipales.
7 millones de déficit
Además, se ha incumplido esta medida presupuestaria tras un informe del cuarto trimestre de 2014 en el que se afirmaba que existía una diferencia de ingresos y gastos de menos de 7 millones de euros y se bajaran los impuestos en 1,2 millones de euros por el anterior equipo local de gobierno el anterior diciembre, una “medida electoralista” a juicio de Yáñez.
Para la portavoz municipal, desde junio de 2011 se subieron todos los impuestos y privatizaron servicios con la justificación de que mejorarían las cuentas del Ayuntamiento, algo que, a su juicio, no ha hecho mejorar los servicios pero ha supuesto que las arcas municipales no se hayan beneficiado.
Además, han tenido que “salvar” el Plan Urban, que finaliza este año, tras dejarlo “inactivo prácticamente durante dos años” el anterior Ejecutivo local.
“Han esperado al año electoral para comenzar a hacer obras muy costosas que no reclamaba la ciudadanía”, ha aseverado Yáñez, para quien este plan estaba desequilibrado pues se hacían “únicamente” obras “electoralistas” y no otros proyectos.
En este sentido, ha asegurado que el actual Gobierno local ha pagado más de 500.000 euros y que antes del 31 de diciembre debe abonar lo restante, hasta un total de 1 millón de euros del plan Urban.