La Junta Electoral desestima el recurso de los votos por correo y señala que los hechos apuntan a un proceso penal
La última semana de la reciente campaña electoral estuvo salpicada por las presuntas irregularidades cometidas por el PP en Mérida, en torno al voto por correos.
El 14 de mayo, varios militantes del PP, entre ellos algunos concejales, fueron sorprendidos en la oficina de correos de Mérida tramitando la documentación para que decenas de personas pudieran votar por ese sistema. Entre esos votos, habría solicitudes de personas ingresadas en centros de mayores públicos y privados de la comarca.
Tramitar votos para que voten por correos personas que tiene problemas de movilidad es una práctica legal, sin duda, pero en esta ocasión el PSOE de Mérida tuvo conocimiento de algunos detalles que podrían implicar irregularidades y denunció los hechos ante la Junta Electoral Local.
Los hechos más llamativos que quería denunciar y aclarar el PSOE tenían relación con dos asuntos:
1/ ¿Qué médico y con qué poderes certificó que las personas que solicitaban el voto por correos estaban impedidas de hacerlo con normalidad?
2/ ¿A qué dirección iban destinadas las papeletas para las que se gestionaba el voto?
Medio centenar de testigos, grabaciones de cámaras de vídeos de la oficina, trabajadores de Correos… podían tener testimonios que aportar en torno a ese asunto. Pero la Junta Electoral Local desestimó la denuncia sin tener en cuenta esos datos, según el recurso posterior, y desestimó la denuncia.
El PSOE elevó un recurso a la Junta Electoral provincial que acaba de desestimar igualmente la denuncia, aunque en este caso los argumentos son de otro tenor.
En concreto, en la resolución que acaba de emitir la Junta Electoral provincial se indica que habiendo llegado esa denuncia el día 24 de mayo no hay margen para adoptar medidas, y “fundamentalmente porque a tenor del contenido del recurso los hechos se consideran residenciados en la jurisdicción penal”.
Desestimados los recursos por esta vía, el PSOE deberá decidir ahora si prosigue la vía penal para esclarecer los hechos alusivos a los votos por correos en Mérida y también en Calamonte.