La oposición ve agotamiento y actitud errática en la Junta ante el virus

Los grupos políticos de la oposición en la Asamblea de Extremadura creen que el Ejecutivo de Guillermo Fernández Vara transmite “agotamiento” y actitud “errática” en la gestión de la pandemia, en la que, a juicio del PP, el presidente extremeño se muestra “cobarde”.

Así lo han puesto de manifiesto en la sesión plenaria que se celebra en la Cámara regional, en la que ha comparecido el vicepresidente segundo y consejero de Sanidad y Políticas Sociales, José María Vergeles, para dar cuenta de las medidas adoptadas en una situación que ha calificado de “complicada sin paliativos”.

Vergeles ha insistido en que los últimos datos muestran “una transmisión comunitaria descontrolada”, que todo apunta seguirá creciendo en los próximos días, aunque ha defendido que gracias a la labor de los profesionales sanitarios el funcionamiento de los hospitales, donde la presión asistencial crece, “es prácticamente normal”.

También ha reiterado que la alta incidencia de contagios responde a que se están haciendo más pruebas por cada 100.000 habitantes que la media nacional, lo que está permitiendo que más de 95 por ciento de los contagiados son asintomático, y ha añadido que pese a todo las tasa de ingresos de infectados, de ocupación y de letalidad está por debajo de la primera ola.

Por ello, ha defendido que las medidas adoptadas, como el cierre de la hostelería y comercio, responden a la intención de “quitarle atractivos a la movilidad”, y que “no fue insensatez” flexibilizar las que se adoptaron en el Plan Navidad porque así lo permitían los datos, aunque después se anulase.

Una ola no, un tsunami

Sin embargo, para la portavoz del PP, Cristina Teniente, la rueda de prensa ofrecida con las nuevas medidas “fue de chirigota”, ante la que su partido sintió “vergüenza”, cansado “de tantos disparates”, sin que nadie asuma errores, y ha reclamado el apoyo del Gobierno central.

Teniente ha indicado que es en los momentos difíciles “son en los que salen los héroes y los que no son dignos de representarnos” y ha acusado a Fernández Vara de no “dar la cara” en la tribuna del Parlamento, además de pedirle que rectifique sus declaraciones sobre el retraso en las vacunaciones porque, a su juicio, “vino a decir que se había utilizado a extremeños como conejillo de indias”.

La portavoz del PP ha asegurado que los datos demuestra que Extremadura “no está en una tercera ola, sino en un tsunami”, como ya se le advirtió, y ha añadido que no es que Extremadura carezca de una manual de instrucciones para afrontar la pandemia, sino que tiene “una enciclopedia de negligencias”.

El portavoz de Ciudadanos, David Salazar, ha puesto en duda la capacidad de la Junta de Extremadura para hacer frente a la “situación insostenible” de la pandemia, ya que se limita “a ir detrás del virus”, con medidas erráticas y a veces contradictorias.

Así, ha criticado que se decretase el cierre de comercio y hostelería en algunos municipios y en otros no, sin restringir la movilidad, que ahora sí se restringe pero los exámenes en la Universidad sean presenciales o que las anunciadas medidas de apoyo a los sectores afectados no entren en vigor hasta febrero.

Por su parte, la portavoz de Unidas por Extremadura, Irene de Miguel, que ha reconocido el difícil papel que tiene Vergeles, también ha echado en falta explicaciones por parte del presidente, ha solicitado el cierre perimetral de la CCAA, ya que no se entiende “que se puedan cerrar municipios y no la región”.

También ha señalado que la oposición “está cansada de hacer propuestas” y ha exigido una mayor vigilancia para que las grandes superficies cumplan con las restricciones y de las reuniones sociales.