La reactivación económica será un proceso muy largo y duro (Blanco-Morales)

La consejera de Hacienda y Administración Pública, Pilar Blanco-Morales, ha subrayado la adopción por parte de la Junta, en el marco de la “concertación social”, de diferentes medidas para minimizar las consecuencias de la pandemia y, sobre todo, facilitar la reactivación económica que será un proceso “muy largo y muy duro”.

Y para lo que habrá que actuar con “un criterio de coordinación” con otras administraciones, así como con los agentes sociales y económicos, ha expresado la también vicepresidenta primera de la Junta durante su participación en el webinar #EscaladaEmpresarial, que organiza la Confederación Regional Empresarial Extremeña (Creex).

En su intervención, Blanco-Morales ha subrayado el “esfuerzo sin precedentes” realizado por pymes y autónomos para mantener el empleo durante esta crisis derivada de la pandemia por covid-19; y ha remarcado la importancia del “trabajo en equipo” y el “diálogo” con los sindicatos y la patronal para afrontar juntos la recuperación.

El Gobierno extremeño, ha defendido, es “sensible” a los “problemas” a los que se enfrentan los empresarios, pilar de riqueza y desarrollo económico, de modo que está a su disposición para articular los mecanismos adecuados que permitan atender sus necesidades, algo en lo que ya ha venido trabajando.

Además de las medidas para la adaptación al teletrabajo y a la atención telemática, ha aludido a la ampliación de los plazos tributarios, la implantación de medidas de gestión económico-financieras de contratación y de agilización administrativa y de los pagos, con “un período medio de pago a proveedores de 34 días en el último mes”, una ligera desviación de lo deseable, aunque ha precisado: “estamos obligados a mejorar”.

El impulso al proceso de transformación digital de la Junta de Extremadura es otra de las iniciativas que ha mencionado la consejera de Hacienda, que también se ha referido a la aprobación del paquete de medidas económicas, dotado con 64,8 millones de euros, con especial atención a trabajadores, autónomos y pymes.

A ello ha sumado el plan de reactivación de la demanda, con una inversión de 6,5 millones de euros, cuyo objetivo es fomentar los intercambios comerciales y aumentar las ventas del comercio al por menor.

Por delante, ha añadido, está el reto del fondo extraordinario de recuperación, que se abordará con los agentes sociales, y de cara al próximo año, el nuevo marco financiero plurianual de la UE y el diseño de un programa operativo.

Un programa que conserve “todo lo que de bueno tiene (del anterior), que es mucho”, y garantizar “su adaptación a las necesidades de este momento inédito y urgido de respuestas” que tienen que “salir del diálogo y de asumir la crítica constructiva”.