El año pasado se registraron 8 ejecuciones hipotecarias diarias en Extremadura
El Instituto Nacional de Estadística acaba de hacer públicos los datos de ejecuciones hipotecarias en España durante el año pasado. Las cifras son malas y siguen mostrando una de las caras más amargas de la crisis. En España, las ejecuciones hipotecarias han crecido un 7,6%; en Extremadura las cifras son especialmente malas ya que es la segunda región con unas cifras más altas en porcentajes (después de Canarias). Así, un total de 2.706 ejecuciones hipotecarias se registraron en Extremadura durante 2014, lo que supone un 1,20 por ciento de las operaciones constituidas, solo superada por Canarias que alcanza el 1,40 por ciento y muy lejos de la media española que se situó en el 0,90 por ciento.
Al calor del boom inmobiliario, entre los años 2005-2008, muchos miles de extremeños juntaron sus ahorros y se metieron a comprar una vivienda, previa la firma de una hipoteca, claro. Era entonces cuando bancos, empresas y políticos presumían de un crecimiento rápido e incitaban a cambiar de coche u de vivienda como una inversión sólida, segura, de futuro.
Ahora sabemos que el resultado de aquella otra estafa. Las viviendas no mantuvieron su precio ascendente, al revés, se venden a mitad de precio por lo que el ahorro de miles de familias se quedó en otros bolsillos. En el informe del INE se señala también que tres de cada cinco viviendas afectadas por este procedimiento fueron contratadas entre 2005 y 2008, los años claves de la burbuja inmobiliaria.
Atrapados por la hipoteca
Pero además, de esa pérdida masiva de las inversiones realizadas en vivienda, miles de familias se quedaron atrapadas en esa trampa hipotecaria y años después aún siguen pagando los resultados de aquel engaño.
Con los datos que acaba de publicar el INE se puede constatar que cada día se llevan a cabo una cifra media de 8 ejecuciones hipotecarias, incluyendo en ese paquete amargo viviendas, locales comerciales, solares, fincas rústicas…
Según datos que ha hecho públicos el INE, de las 2.706 certificaciones por ejecución en la región, procedimiento por el que se ordena la venta de un bien inmueble a cuya hipoteca el comprador no puede hacer frente, 323 lo fueron sobre fincas rústicas y, de las urbanas, 1.371 eran viviendas; 206, solares; y 806 otras urbanas.
Viviendas usadas
En cuanto a las ejecuciones según el estado y titular, de las 1.371 viviendas, 151 eran nuevas y 1.220, usadas; 814 con titular persona física; y 557 persona jurídica.
A nivel nacional, las ejecuciones hipotecarias sobre vivienda habitual alcanzaron las 34.680, un 7,4% más que durante 2013. Los datos del INE no recogen qué porcentaje de ejecuciones hipotecarias acaban en desahucios o lanzamientos como gustan de denominarlo en jerga jurídica.
