La carretera N-430: un ‘atolladero’ de camiones pesados y accidentes

Es una de las carreteras españolas que más tráfico pesado soporta. En ella los accidentes de camiones se repiten a diario. A lo que se suman trazados ‘intransitables’, asfaltado desgastado y desniveles.

Así describe la Plataforma por el Desdoblamiento de la N-430 la situación de esta carretera que conecta a Extremadura con el levante. Reclaman una vía “digna y segura” y su conversión en la autovía A-43. También piden al Ministerio que tome de inmediato medidas ante el deterioro del trazado por las provincias de Badajoz y Ciudad Real.

Con el inicio de la temporada del tomate en las Vegas del Guadiana circulan por la carretera más de un millar de camiones a diario. Son vehículos de más de 40 toneladas, que convierten la carretera en un espacio peligroso para el conjunto de conductores, según denuncian.

Saturnino Alcázar, alcalde de Herrera del Duque, critica que no puede tolerarse más tiempo una infraestructura así. Tanto desde el punto de vista de la seguridad ciudadana como para el desarrollo de la comarcal. De hecho resalta que es una carretera estratégica, que conecta el Mediterráneo con el Atlántico.

De ella solo restan 200 kilómetros para terminar de convertirse por completo una autovía: el tramo que separa la localidad pacense de Torrefresneda y Ciudad Real.

Movilización ciudadana

Medio centenar de municipios de Badajoz y Ciudad Real, así como diferentes asociaciones y ciudadanos, reactivaron meses atrás el movimiento en defensa del desdoblamiento de la carretera.

Lamentan que es un compromiso incumplido por parte del Ministerio desde 2002. Ante el 'inmovilismo' del Ejecutivo central anuncian nuevas movilizaciones.

Explican que en los últimos contactos mantenidos, con los delegados del gobierno de Badajoz y Ciudad Real, la respuesta ha sido que está previsto un nuevo estudio informativo, “que sería ya el tercero o el cuarto”.

El alcalde de Herrera del Duque muestra su sorpresa por los cambios repetitivos, cuando “lo normal es desdoblar la carretera convencional que ya existe” y convertirla en una autovía. Es algo que ya se hizo en el caso de la A-66 o la A-5.