La movilidad del verano está dando lugar a brotes pero “no podemos parar a la gente”
La movilidad de personas inherente al verano, a las vacaciones, de gente que viene a Extremadura pero también extremeños que viajan fuera, se está haciendo notar y uno de cada tres brotes es importado.
Ahora se están notando los efectos de los primeros veraneantes y emigrantes que llegaron a principios de agosto, y seguirán produciéndose casos a lo largo del mes, de modo que a finales se sabrán los de las celebraciones centrales en torno a la Virgen de agosto, el día 15, que es cuando más llenos están los pueblos.
Así lo augura el vicepresidente segundo de la Junta y consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles, que afirma que hay ya muchos visitantes en la Comunidad. De hecho el brote de Villarta tiene su origen en Madrid.
“Gente que viene a Extremadura, gente que sale; estamos viendo ahora lo que ocurrió hace catorce días y todavía se van seguir produciendo situaciones que tienen que ver con la movilidad, a finales de agosto veremos lo que se produce ahora”.
“La movilidad tiene un papel determinante pero no podemos parar a la gente, es necesaria pero con seguridad, ir a sitios que vemos no cumplen medidas, y dejar de ir a los que no”.
“Destrozo” económico
“Si prohibimos la movilidad”, sigue Vergeles, “lo que estamos haciendo es un destrozo económico de primera magnitud; hay que encontrar un equilibrio entre ambas cosas, salud y actividad económica”.
Por otro lado avisa que “cuando terminemos de ver los efectos de la movilidad empezaremos a ver los primeros casos de gripe, se mezclarán con los del virus, son dos enfermedades que una complica la otra”.
Por eso la Junta prepara para septiembre aplicar pruebas creadas por sendas empresas para discriminar la gripe común del coronavirus, test “que lo distinguen, con prueba serológica y PCR rápida con pinchado en el dedo”.
“Implantaremos el serológico en el cribado de atención primaria, y el de PCR en hospitales, dos tipos de test que están muy avanzados”.
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