La oposición reclama un protocolo sobre qué hacer si sobran dosis de la vacuna

Los grupos de la oposición en el Parlamento extremeño han pedido a la Junta que elabore un protocolo sobre qué hacer con las dosis de vacunas sobrantes y han reclamado explicaciones tras conocerse que se han vacunado dos ediles del PSOE, la alcaldesa de Higuera de la Serena, María Triviño, y la concejala en Plasencia Soraya Cobos, directora del centro sociosanitario de la localidad.

El PP ha pedido el cese de Soraya Cobos y su renuncia al acta de concejal, además de denunciar un nuevo caso de “favoritismo y abuso de poder” en la administración de las vacunas en la región en la persona de la alcaldesa de Higuera de la Serena, que también se ha vacunado sin ser personal de riesgo, según el portavoz popular, Luis Alfonso Hérnández Carrón.

El dirigente del PP ha considerado “absolutamente aberrante” el caso de Cobos, ya que se ha vacunado antes que los 400 trabajadores del centro que dirige, personal sanitario y no sanitario del antiguamente denominado Hospital Psiquiátrico de Plasencia.

Tanto PP como Unidas por Extremadura (UP) han pedido hoy al Gobierno extremeño que elabore un protocolo que deje claro cómo actuar en caso de dosis sobrantes para evitar lagunas que permitan “el favoritismo hacia los amigos y amigotes del PSOE”, ha dicho Hernández Carrón.

En ese sentido, ha adelantado que preguntarán al consejero de Sanidad y Políticas Sociales, José María Vergeles, “cuántas vacunas se han administrado a quien no les correspondía” en la región y si puede asegurar que no ha habido más casos como estos dos.

Para el portavoz popular, la realidad es que “aquí no sobra ni una sola vacuna” porque aún no están vacunadas todas las personas mayores y los sanitarios, que son los colectivos prioritarios, “los que más expuestos están al virus”.

Calendario de inmunización

El dirigente popular ha pedido que el Gobierno extremeño publique el calendario y protocolo de inmunización contra la COVID-19 en Extremadura y ha acusado a la Junta de actuar con “total opacidad” en en ese asunto, a diferencia de otras comunidades autónomas, una “falta de transparencia indignante” que, en su opinión, también marcó su gestión en la primera y segunda ola pandémica.

Para la portavoz de UP, Irene de Miguel casos como el de Soraya Cobos son “inexplicables” y suponen una “chapuza grandísima y muy peligrosa”, lo que hace necesario ese protocolo sobre vacunas sobrantes, ya que “hasta los agricultores son más prioritarios que la edil socialista”.

Más cauto se ha mostrado el representante de Cs en la Junta de Portavoces del Parlamento extremeño, David Salázar, quien ha dicho que pedirán información sobre lo ocurrido y solicitarán que se depuren responsabilidades si se demuestra que ha habido favoritismo a la hora de administrar las vacunas.

Sin embargo, para la portavoz parlamentaria del PSOE Lara Garlito ambas ediles socialistas se han vacunado conforme a los protocolos establecidos y siguiendo las indicaciones de Salud Pública.

“Mala planificación”

El Sindicato Médico de Extremadura (Simex) ha mostrado su descontento por el desarrollo y la “mala planificación” del proceso de vacunación contra el coronavirus en la región y ha exigido una investigación “por vacunaciones a personal que no está en contacto con pacientes covid”.

Según un comunicado, ayer se remitió una carta a Gerencia del Servicio Extremeño de Salud (SES) para pedir “explicaciones” por el retraso en la vacunación al personal médico de los hospitales y centros de salud de Extremadura, debido a que según el protocolo del Gobierno central “todos los médicos que atienden a pacientes con patología covid tendrían que ser los primeros en ser vacunados después de las residencias geriátricas”.

La información facilitada por el SES el pasado domingo en relación a que se llevaban vacunados 8.400 sanitarios hizo al sindicato pensar que “se estaba vacunando a trabajadores sin relación directa con el covid”.

Sin embargo, indica, un día después “se conoció que se anulaba la vacunación prevista para esta semana de personal médico por falta de vacunas”.

Simex afirma además que ha recibido numerosas quejas de facultativos que comunican que “durante la pasada semana se vacunó a trabajadores sin relación directa con la asistencia a pacientes con COVID-19”.