Relevo en el Consejo de la Juventud en una comunidad donde dos de cada tres menores de 30 está en paro
Extremadura es la quinta región europea con la tasa de paro más elevada, con el 60 por ciento de sus jóvenes parados. O lo que es lo mismo dos de cada tres menores de 30 años que busca trabajo no lo encuentra. A ello se une la precariedad en el empleo (hasta el 90% de temporalidad) y dificultades para emanciparse. Situaciones que han llevado a muchos a migrar.
Esta es la foto fija de la juventud extremeña al que se enfrenta desde este sábado la nueva presidenta del Consejo de la Juventud de Extremadura, un órgano para el que hay dos candidatas dispuestas a coger el relevo de Enrique Hernández, que deja la presidencia tras cuatro años.
El Consejo de la Juventud de Extremadura se compone de 70 asociaciones y entidades juveniles, que representan en torno a 40.000 jóvenes. Se trata de una estructura pública que reúne a las asociaciones juveniles, secciones juveniles de asociaciones de adultos o consejos locales de juventud. No debe confundirse con el Instituto de la Juventud, que es el órgano de la Junta encargado de las políticas. La diferencia es que en el Consejo están representadas directamente las organizaciones juveniles.
Las dos candidaturas para presidir el CJEx
Destaca el presidente del consejo saliente que deja un Consejo de la Juventud fuerte, independiente de los “intereses partidistas” y donde se ha desarrollado una profunda reforma interna que ha permitido que sea un organismo estable.
Piensa que en el relevo tiene que haber gente comprometida, que defienda el interés general de la juventud -y no el particular-- y sobre todo a las personas y sectores más débiles de la juventud. Mirando más allá de Extremadura, pensando que hay soluciones y experiencias que ya funcionan fuera y que pueden ser exportables.
Las elecciones del Consejo de la Juventud de Extremadura tienen lugar este sábado en Mérida en una jornada donde también se votan los informes de gestión del organismo del último mandato y se tomarán decisiones importantes de cara a la nueva etapa. El equipo escogido será el encargado de defender los derechos e intereses de la población joven en Extremadura en el nuevo periodo.
La primera de las candidaturas se compone de 9 organizaciones que de manera conjunta presentan a la asamblea como presidenta a Elena Ruiz, de Scouts (presidencia), y que cuenta también con representación de Cruz Roja Juventud, Juventud Estudiante Católica, Juventudes Comunistas, el Consejo de la Juventud Local de Cáceres, Achikitú, Jóvenes de Extremadura Unida, Adenex y la OJE.
La candidatura, denominada “+CJEx: ilusiones compartidas”, pretende conseguir un consejo “más libre, plural, independiente a cualquier intervención o presión externa, participativo y encaminado a mejorar la sociedad desde nuestra tierra”.
Se suma la candidatura de María del Carmen Contreras, que aspira a la presidencia desde la asociación Alcampus, que se considera una persona activa, inconformista, participativa y luchadora. “El CJEx debe ser de todas y de todos, no un búnker asociativo que mire más por los intereses particulares”, dice.
También hay otras candidaturas independientes para para hacerse cargo de otras de las áreas del órgano del Consejo de la Juventud, con candidaturas de Juventudes Socialistas, Mujeres Jóvenes, CCOO y Alcampus.
Los jóvenes, cada vez más pobres
Enrique Hernández advierte que la situación de los jóvenes ha empeorado a medida que la crisis ha ido avanzando. Comenta que en contra ha habido un aumento del 40 al 50 por ciento en los porcentajes de la pobreza juvenil en tan solo dos años en la región.
No obstante aplaude que se haya logrado un aumento de la participación ciudadana entre los jóvenes del 20 al 40 por ciento en esta etapa, generando mayor interés por los asuntos políticos. Jóvenes que han entendido que el acto político no es ir a votar cada cuatro años.
Destaca además la gran actividad que desarrolla hoy en día el consejo, y la implicación no solo de las 10 personas de la comisión ejecutiva, sino de decenas de jóvenes que de manera voluntaria están implicados en los procesos.
Paro como mal endémico
Apunta Enrique Hernández que frente a los graves problemas de paro y precariedad existen diferentes tipos de juventud. Identifica aquellos que no tienen problemas económicos, frente a otros tantos que no proceden de familias acomodadas o a quienes no les puede echar una mano la familia. Son estos quienes pasan muchísimas dificultades a la hora de desarrollar su proyecto de vida. Hasta el punto que el desempleo puede desembocar en la pobreza.
Así achaca en ocasiones la falta de interés de las políticas públicas para combatir los problemas reales de la ciudadanía, con políticas que más que hacer una juventud comprometida y activa, parecen hechas para adolescentes según critica.