SOS Guadiana denuncia que el camalote ya engulle el 34% del río en Medellín
La Plataforma Ciudadana SOS Guadiana denuncia que el camalote, la planta invasora más peligrosa de Extremadura, ya coloniza el 34 por ciento del río a su paso por la localidad de Medellín.
Voluntarios de la plataforma han realizado un nuevo vuelo aéreo con drones, que aporta imágenes multiespectrales. De ellas se concluye que son unos 76.000 metros cuadrados de camalote, teniendo en cuenta que la densidad de plantas es de 65‐130 plantas/m2 según diversos estudios bibliográficos.
La estimación de plantas de jacinto de agua en este tramo de río sería de unos 5‐10 millones de plantas.
“A pesar de ello, hay que dar gracias porque la situación en otros tramos del río Guadiana a su paso por otros términos municipales situados entre Medellín y Mérida es mucho peor”.
Critican que ya se han observado tramos de río de 500‐700 metros cubiertos totalmente de camalote, sin que se observe ninguna lámina de agua en superficie, siendo todo un tapiz verde.
El problema no es solo “alarmante o acuciante” aguas abajo del río Guadiana, sino que el jacinto de agua está colonizando áreas del río aguas arriba del puente de la autovía EX‐A2 Miajadas‐Vegas Altas. Encontrando ya “manchas de camalote bastante importantes y que dan buena muestra del carácter invasor y el poder colonizador del jacinto de agua, siendo algo bastante preocupante”.
Nuevo llamamiento
Ante esta realidad SOS Guadiana hace de nuevo un llamamiento a las diferentes administraciones implicadas, Confederación Hidrográfica del Guadiana y Junta de Extremadura, para que elaboren y pongan en marcha un plan plurianual coordinado de actuaciones. El objetivo sería el seguimiento, detección, control y combate temprano de la plaga en el río y sus afluentes.
Piensan que si no se quiere repetir la situación provocada por esta planta invasora en la cuenca media del río, y que el daño a los ecosistemas acuáticos sea irreparable, además del perjuicio ocasionado a otros usos del río como la pesca y otros deportes, junto a los sistemas de regadío y otras instalaciones hidráulicas.
Denuncias
La plataforma traslada que en su día ya se puso sobre la mesa de la Confederación Hidrográfica del Guadiana una herramienta para mantener, al menos bajo control, al camalote. “Sin embargo, ni siquiera ha sido tomada en consideración, la situación actual del río continúa siendo muy preocupante”.
Ha pasado una década desde que el camalote hiciera acto de presencia en la cuenca, motivo por el que tachan de indignante que todos los millones de dinero público invertidos, el problema siga siendo el mismo, o incluso peor. “Y que además, ninguna administración haya asumido ninguna responsabilidad al respecto”.
La plataforma lamenta también que el discurso a la defensiva que ha podido observar en técnicos de la Confederación en sus declaraciones, lo que dificulta --dicen-- la colaboración entre el organismo de cuenca y las plataformas ciudadanas, cuyo objetivo prioritario es ser parte de la solución y no del problema y, sobre todo, devolverle la dignidad a un río que es de todos.
