“AGE no fue una carambola, sino la consecuencia de un movimiento de varios años”
Xoán Hermida, coordinador nacional de Espacio Ecosocialista, partido integrado en AGE, acaba de publicar [Re]construír a esquerda nacional. Desde a Rolda de Rebeldía a AGE, que reúne tres años de artículos e intervenciones sobre la evolución de la izquierda gallega.
La obra, que sirve para lanzar el sello Obencomún, consta de 30 textos, y constituye una apuesta por la construcción de una “izquierda nacional, transversal, renovadora y transformadora”. Recuerda que desde hace años los hombres y mujeres de la izquierda se encuentran huérfanas de referentes que liberen sus energías y sus demandas de cambio y señala la importancia del movimiento 15-M para poner de relieve la “desafección de sectores sociales importantes con respecto a los instrumentos partidarios existentes” y para mostrar “una demanda de una nueva forma de hacer política”.
La obra parte de una intervención inicial en la Rolda Rebeldia organizada hace tres años por el Encontro Irmandiño, a la que Xoán Hermida concede una gran importancia: “fue la primera reflexión conjunta de gente de la izquierda de dentro y de fuera del muro, de gente que estaba dentro del BNG, pero también de gente que estábamos fuera, en los movimientos sociales”. Sin embargo, Hermida también pone en valor el periodo anterior: “Creo que habría que analizar la década que va del 2002 al 2012. En el 2002, con el nacimiento de Nunca Máis, es cuando nacen los movimientos sociales en Galicia, tal y como los conocemos hoy. Antes había unos protomovimientos pero funcionaban sobre todo como correas de transmisión de los partidos. Y ahí comienza un proceso de empoderamiento de los movimientos sociales que termina en AGE”.
Y el libro llega hasta los primeros meses de actividad de AGE, de la que Hermida destaca que “no es el final del camino. A través de AGE se cataliza todo ese proceso. La prueba es que mucha de la gente que está en el entorno de AGE es gente que estuvo en todo el proceso del Foro Social Galego”. Xoán Hermida hace hincapié en que “los resultados de AGE no fueron una carambola, una casualidad, sino una consecuencia de un movimiento de varios años y de muchas voces que estábamos diciendo que el paradigma de la izquierda había cambiado”. En cuanto al futuro de Alternativa, el autor señala que la AGE necesita “ampliarse” y sobre todo “tener miembros en lugar de participantes. Hoy sólo se puede participar a través de sus cuatro partidos y AGE necesita crear espacios de participación de la ciudadanía”.
Hermida añade que el período que va de Rolda Rebeldía a las elecciones “fueron tres años de mucha actividad, no sólo en las calles sino también en lo que se refiere al pensamiento, por parte de distintas personas que desde distintas trincheras estaba trabajando por lo mismo. Me parecía que era el momento de reivindicar ese campo, el de la teorización. Revisando los textos vi que tenían coherencia interna, y que en ellos también se advertía una evolución: por ejemplo los primeros eran muy críticos con IU y en los siguientes ya se reconoce la evolución de sus propuestas”.
El autor denuncia que “la izquierda ha perdido la presencia natural entre la sociedad civil activa”. “Había una visión sobre la ciudadanía organizada de tutelaje y de correa de transmisión de los partidos. Desde ahí se avanzó hacia una idea de representatividad. Y creo que ya estamos en la tercera fase: lo que debe hacer la izquierda es estar implicada con ellos. En el fondo es recuperar la vieja política de hace un siglo”, dice. Y concluye: “Es necesario repensar la izquierda porque si no, haremos resistencia pero no alternativa. Es necesario repensarla en su relación con la ciudadanía”.
En cuanto al futuro de la izquierda, Hermida señala que tiene “una crisis de paradigma” y “sufre un cambio estructural motivado por el cambio de la tradicional clase obrera. Y eso no se arregla en unos pocos años”. Pero añade que observa “indicadores de inteligencia en la izquierda y hace años no lo hacía. Hay gente que desde posiciones distintas está comenzando a construir cosas interesantes”. Y destaca la importancia de la acción frente a los grandes discursos: “la acción hace mucho. La acción permite contaminarse unos con los otros”.
Convocatorias electorales
Hermida destaca que “las municipales cerrarán un ciclo que se inició con el 15M y tienen una importancia capital”. En cuanto a las elección europeas y a la posibilidad de formar una frente que agrupe a todas las fuerzas que apuestan por la ruptura, el autor cree que “un escenario en el que en las europeas cada uno fuera por su lado no seria dramático, pero creo que la gente no lo entendería y nos castigaría por eso. Ante una situación tan dramática la izquierda puede permitirse muy pocos lujos y no se puede permitir ir separada a unas elecciones”.
Y concluye que “las europeas deben ser una demostración de que se puede construir una alternativa. La unidad que hace falta es la unidad de todos frente a las élites del régimen, que son el PSOE, CiU y el PP. Tiene que ser la unidad de todos los demás bajo un programa democrático y de izquierdas” y señala que “con esta situación la gente no entendería que no se formara una alianza de izquierdas en el Estado entre fuerzas nacionalistas y no nacionalistas. Izquierda Unida está dando pasos para entender la pluralidad nacional del Estado y otras fuerzas siguen enrocadas en limites que no tienen sentido”.
Ecosocialismo
Hermida, coordinador nacional de Espacio Ecosocialista, reconoce que “el ecosocialismo en Galicia va a ser una fuerza pequeña en Galicia durante algún tiempo. Pero creo que tiene mucho recorrido porque Galicia ha sufrido muchísimos ataques a su modelo económico, que era un modelo sostenible”. Y añade que “nuestro papel hoy por hoy debe ser el de proporcionar ideas. Las batallas no se deben decidir por un sistema de mayorías y minorías, como recordaba Sacristán, sino que nosotros ganaremos cuando seamos capaces de transversalizar nuestras ideas políticas a las otras fuerzas”.