Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

Padres protestan por el recorte de médicos en oncología infantil del Hospital de Santiago

El Hospital de Santago de Compostela

Daniel Salgado

1

Unos 40 padres y madres de niños con enfermedades oncólogicas, pacientes del Hospital de Santiago de Compostela, están movilizándose contra lo que consideran recortes en el servicio. El paso, desde 2019, de cinco a dos pediatras especializados y otras “cuestiones clave” de organización han llevado a este colectivo a entrevistarse con altos cargos de la Xunta de Galicia y, pese a algunos compromisos, entienden que la situación no ha cambiado. La Consellería de Sanidade sostiene, sin embargo, que esos dos pediatras lo son sobre una plantilla de tres, establecida en el plan funcional vigente. “No hubo una buena planificación y ahora no encuentran médicos”, replica uno de portavoces de los padres, en conversación con elDiario.es.

“La planta de oncología infantil debería tener una plantilla absolutamente blindada sin estar cambiando destinos”, opina este padre de un paciente. El Servizo Galego de Saúde admite que, en el Hospital de Santiago, cuya gerencia dirige la prima de Alberto Núñez Feijóo, Eloína Núñez, y que acumula conflictos y protestas, esto no se cumple. De las tres pediatras que adscribe al centro, una está de “baja maternal por alto riesgo” y otra concursó para una plaza en otra área sanitaria. La primera fue sustituida. La segunda no. Hay, añade el Sergas, tres profesionales que “compatibilizan sus tareas con trabajos en áreas afines”. Y “se está trabajando para incorporar un tercer pediatra, pues el objetivo es cumplir el plan funcional”. Para los padres y madres que, después de meses de encuentros con altos cargos y compromisos –dicen– incumplidos, han decidido hacer público su malestar, no es de recibo.

“Oncopediatría del Hospital de Santiago es la de mayor experiencia de toda Galicia”, sostiene este usuario, “por ser la que realiza los trasplantes de médula y llevar el mayor número de casos, y los más graves. Lamentablemente ha ido perdiendo plantilla desde 2019 por bajas y permisos de maternidad. Además de los pediatras, también ha descendido el número de enfermeras”. El Sergas asegura a esta redacción que el personal de enfermería cumple las ratios y que el cuadro de oncohematología pediátrica “es totalmente estable, compuesto por profesional propietario e interino”. La experiencia de las familias dista de las explicaciones oficiales y se remonta a la primavera de 2019.

Entonces se jubiló el jefe de sección del área. “Las familias cogieron medio. Fue un verano muy duro”, señala. Asanog (Asociación de Axuda a Nenos Oncolóxicos de Galicia) medió ante la cúpula de la Consellería de Sanidade para traer un doctor especialista que la asumiese. Vino, pero el puesto sigue vacante. Rodríguez Carro recuerda que la Administración subscribió entonces algunos compromisos: una jefatura con autonomía suficiente respecto a pediatría general y despacho directo con la consellería, un plan de formación continuado para los trabajadores que facilitaría su estabilidad y la preponderancia del hospital compostelano –donde se realizan trasplantes– respecto a los otros dos hospitales de referencia en la materia, el de Vigo y el de A Coruña. A su ver y de los padres y madres que respaldan, no han cumplido. Las bajas en el servicio y la posibilidad de que el que iba a ser nuevo jefe de sección cambiase de destino los llevaron, en noviembre del pasado año, a volver a movilizarse. Nuevas reuniones, reclamaciones ante la Valedora do Pobo o 2.500 firmas por registro fueron algunas de sus acciones. “Siempre fuimos muy prudentes. Fuimos paso a paso, pero no nos dejaron otra salida que hacerlo público”, dice uno de los padres.

“La pediatría oncológica es un trabajo vocacional. Se trata de gente con una humanidad excepcional”, añade. Lo admitió la cúpula de la consellería, recuerda, cuando en una reunión explicó a los padres y madres que la oncopediatría “quema y los profesionales vienen y van, pero no hay problema porque se forman otros”. “Ahora resulta que le es difícil encontrarlos porque no los hay”, afirma este portavoz, “es una contradicción y una muestra de la falta de planificación”. España es uno de los cinco países de la Unión Europea en donde la pediatría oncológica no es una especialidad. Los profesionales del ramo son pediatras que se forman por iniciativa propia. Por eso le parece fundamental la solicitud de un plan de formación continuada del Sergas “como así recomienda Europa” y así lo había prometido el departamento de Sanidade. “Nosotros no le podemos dar las soluciones a la Xunta, no somos especialistas”, se queja, “pero el Gobierno gallego tiene las competencias en sanidad e igual que inventaron soluciones rápidas para atención primaria, pueden hacerlo para pediatría oncológica”.

Etiquetas
stats