El PSdeG evita cerrar su crisis a la espera de un líder que se postule
Casi salieron como entraron. El Comité Nacional del PSdeG celebrado este sábado finalizó sin una vía clara de salida a su crisis. Hubo numerosas peticiones de “asunción de responsabilidad” a Pachi Vázquez, pero menos y menos claras de lo que se esperaban. Tan solo un grupo minoritario, de los próximos a Touriño, fue más allá al exigir que se constituyera una gestora que se haga cargo del partido hasta el congreso del próximo año y luego de las casi 100 intervenciones centradas en las llamadas a la reflexión y a la reconexión con la sociedad.
Sí hubo, no obstante, peticiones generales para que se acelere la renovación de la actual dirección. Muchas de las intervenciones que este sábado se dieron en el Congreso Nacional insistieron en solicitar que los dirigentes fueran renovados durante lo primer trimestre de 2013. Y también hubo numerosas llamadas al cambio en la elección del próximo secretario general, ya que son bastantes las voces que piden que se haga en un congreso abierto a todos los afiliados, lo que supondría romper así con el tradicional método de elección a través de delegados. No obstante, nadie se postuló claramente a la secretaría general, por lo que la crisis sigue a la espera de ser finiquitada.
También hubo voces que hicieron hincapié en la importancia de que este congreso fuera “ordinario” en lugar de “extraordinario”, ya que este último tipo únicamente permite “un cambio de caras” y no reformas en el ideario. Y es que, para numerosos miembros del partido, “lo más importante” en esta cita es que “el debate político” acompañe al relevo en la cúpula del PSdeG.
Pero si algo fue evidente en el Comité Nacional de los socialistas fue la división del partido. Se volvieron a verter acusaciones contra Pachi Vázquez por la composición de las listas electorales y hubo quien lo acusó también de gestionar la formación política de manera feudal. Llegó a haber abucheos de algún militante e incluso el ex ministro José Blanco insistió en “renovar el partido” y “abrir un nuevo ciclo”, unas palabras que para muchos fueron ya las de un aspirante a la secretaría general.
No obstante, importantes dirigentes censuraron la actitud de José Blanco, a lo que llegaron a recordar el escaso apoyo que tiene ya en el PSdeG. La fractura se hizo evidente con otras intervenciones, dejando también claras las diferencias territoriales en la formación socialista. Hubo dirigentes y alcaldes de alguna zona que no dudaron en mostrar su apoyo a Vázquez, mientras que cargos orgánicos e institucionales, principalmente de las provincias de A Coruña y Pontevedra, protagonizaron duras críticas. Ni Abel Caballero, que no habló y prefirió ser neutral, ni Gómez Besteiro, que semeja uno de los posibles aspirantes a la secretaría general, se manifestaron.
Además, y a pesar de que Pachi Vázquez avanzó su adiós al aclarar que no será “un obstáculo” en la renovación, hay quien aún duda que su marcha sea definitiva. Si nadie se decide a dar el paso, el actual secretario general podría intentar aguantar al frente del PSdeG.