Marlaska reivindica el “éxito” de su política migratoria mientras la llegada de pateras se duplica en Balears

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha defendido este miércoles la política migratoria del Gobierno frente a las críticas vertidas por el diputado del PP en el Congreso José Vicente Marí, quien le ha reprochado que esté “sembrando de barracones” para migrantes “todos los puertos del país”: “Ya están haciéndolo en Palma, Eivissa y Fuerteventura”, ha espetado el popular, quien ha recriminado que el Ejecutivo central haya convertido la inmigración “en un problema de primerísimo orden”.

Durante la sesión de control al Gobierno en la Cámara Baja, tanto el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, como Marlaska han respondido que las llegadas de migrantes de forma irregular se han reducido en más de un 30 % en lo que va de año, una cifra que contrasta, tal como ha recordado Marí, con los números relativos a Balears: en lo que va de año, más de 5.000 personas han llegado a las islas vía marítima en lo que supone más de un 95 % respecto al mismo periodo de 2024. De mantenerse la tendencia actual, el archipiélago podría cerrar 2025 con unas 11.000 personas migrantes llegadas por mar, prácticamente el doble que las recibidas el año pasado, cuando arribaron a las islas 5.882 migrantes.

Marí ha responsabilizado al Gobierno de que, en la actualidad, la inmigración sea el tercer problema más grave para los españoles, según el CIS, y le ha preguntado por la existencia de una ruta de tráfico de personas hacia las costas de Balears. Marlaska, en este sentido, ha recordado las palabras del presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, en las que invitaba al Gobierno a “aprender” de las políticas migratorias de Grecia e Italia, asegurando que España tiene la mitad de llegadas por mar que estos países y que la política del Gobierno en materia migratoria “es un éxito”.

“No sé quién tiene que aprender”, ha respondido el titular de Interior, quien ha evitado “meterse con las políticas de Italia y Grecia ante un fenómeno absolutamente complejo y ante el que se está siendo efectivo”.

A las cifras aportadas por el ministro, Marí ha respondido con datos de llegadas a Balears y le ha reprochado su inacción con el “drama migratorio” en esta comunidad autónoma. “Hace tres años, mientras agraviaban a Argelia, mientras no cubrían ni cubren las vacantes y mantienen en la indigencia a los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, a Balears en 2024 llegaron 5.900 migrantes y en lo que va de 2025 ya vamos por 5.100”.

Le ha recriminado al ministro, además, “lavar su mala conciencia con palabras grandilocuentes mientras los migrantes mueren en el Mediterráneo. Y llaman racistas a todo el mundo pero no asumen la tutela de más de 1.000 menores que han pedido asilo”. “Lo único que proponen es sembrar de barracones todos los puertos del país y ya están haciéndolo en Palma, Eivissa y Fuerteventura”, ha añadido.

Para “resolver el caos”, ha propuesto al Gobierno seguir el plan de Núñez Feijóo y lanzar “un mensaje claro de que solo se admite inmigración legal, ordenada y con contrato de trabajo”. “Si ustedes no quieren o no saben, convoque elecciones, que ya lo haremos nosotros”, le ha retado desde su escaño.

Ante estas acusaciones, Marlaska ha insistido en destacar la acción de Gobierno de los últimos siete años con “más policías y más guardias civiles para proteger las fronteras, más remunerados en un 40%, trabajando con Europa y con los países de origen y tránsito, evitando el 40% de las salidas irregulares, salvando vidas y luchando por una migración legal, segura y ordenada”.

“Somos un ejemplo en Europa”, ha concluido Marlaska tras recordarle a Marí que “no es competencia del Ministerio del Interior convocar elecciones”.

Por su parte, Sánchez ha vuelto a defender sus políticas de promoción de la migración regular y lucha contra las mafias, lo que ha permitido descender las llegadas ilegales en un 30 %, en tanto que ha subrayado que en la última década la mayoría de extranjeros llegó por vías legales frente a «solo» un 6% que lo hicieron de forma ilegal.

Con estos argumentos, el presidente del Gobierno ha replicado este miércoles en el Congreso al líder de Vox, Santiago Abascal quien, tras incidir en el coste económico y enumerar presuntas violaciones y agresiones cometidas “por menores extranjeros y migrantes”, ha tildado a Sánchez de “corrupto”, “traidor” e “indecente”.