Máxima alerta en Bruselas por temor a un atentado “inminente”
Ningún metro circulará este sábado en Bruselas, tras la decisión del Centro de Crisis belga, esta madrugada, de elevar al máximo el nivel de alerta terrorista en la región, pasando del 3 al 4, ante la “amenaza inminente” de atentados.
La Sociedad de Transportes Intercomunales de Bruselas (STIB), que anunció este sábado la anulación de la circulación de las líneas de metro, aunque no las de los autobuses, ha comunicado que el metro permanecerá cerrado también el domingo hasta las 15:00 horas por recomendación del Gobierno belga.
El Servicio de Transportes Intercomunales de Bruselas ha informado que se volverá a evaluar la situación durante la mañana del domingo. Esta nueva restricción no afectará a los autobuses, pero sí a algunos tranvias, según reza el comunicado del STIB.
El Centro de Crisis belga había aconsejado al Gobierno de la región de Bruselas la interrupción de la circulación del metro en el conjunto de la red entre el sábado 21 y el domingo 22 de noviembre. Según ese Centro, era importante difundir cuanto antes la información del aumento de la alerta de seguridad “para que todo el mundo esté informado desde esta mañana”.
A las autoridades administrativas de los 19 distritos comunales de la región de Bruselas, el Centro de Crisis les aconseja también la anulación de los grandes acontecimientos previstos en sus territorios. También se les pide que lleven a cabo “una comunicación dirigida a la población” para que se eviten los lugares donde suele haber gran presencia de personas.
Asimismo recomiendan la cancelación de los partidos de fútbol de primera y segunda división durante este fin de semana, aunque todavía no se ha comunicado ninguna decisión al respecto. Además se recomienda aumentar el dispositivo policial y militar que patrulla las calles de Bruselas.
La policía busca a dos hombres
La decisión del aumento del nivel de alerta por riesgo de atentados se adoptó tras un nuevo análisis llevado a cabo por el Órgano de Coordinación para el Análisis de Amenazas (Ocam).
Esta medida excepcional, que sólo ha sido adoptada hasta la fecha en dos ocasiones, se debe a que “el análisis demuestra una amenaza grave e inminente que necesita la adopción de medidas de seguridad específicas, y recomendaciones particulares a la población”, indica el Centro de Crisis en su página web.
El periódico belga Le Soir ha informado de que la Policía está a la búsqueda de dos hombres. Según fuentes de la investigación, uno de ellos llevaría en su poder una bomba del mismo tipo que la que se usó en los atentados de París.
Hacia las 15:00 horas las fuerzas especiales de la Policía Federal de Bélgica han detenido a cuatro personas que viajaban en un vehículo “sospechoso” en el histórico barrio de Grand Sablon en Bruselas, según han informado fuentes militares a la cadena de televisión belga RTL.
Entre las recomendaciones de las autoridades belgas en esta situación figuran evitar los lugares de fuerte concentración de personas, como los conciertos, los grandes acontecimientos, las estaciones, los aeropuertos, los transportes en común y los lugares de muchos comercios. También se pide a la población que facilite los controles de seguridad.
“No difundan rumores. Sigan las informaciones oficiales de las autoridades y los servicios de la policía”, indicó el Ocam. Para el resto del país sigue en vigor el nivel de alerta 3, elevado, que se aplica en los casos de amenaza “posible y probable” y que se adoptó tras los atentados de París.
Nuevas detenciones
El diario francés Le Monde ha informado que durante la mañana un belga de origen marroquí de 26 años, Ahmet Dahmani, ha sido arrestado en Turquía por haber supuestamente participado en la exploración previa a los ataques que los yihadistas llevaron a cabo en París y en la que se eligieron los lugares que fueron objetivo de los atentados en París el pasado viernes. La detención ha sido confirmada por el Gobierno turco.
También durante la mañana se habrían producido dos detenciones más en Turquía. Se trataría de dos jóvenes presuntamente enviados a la localidad turca de Antalya por el ISIS para ayudar a Ahmet Dahmani a cruzar la frontera entre Turquía y la parte ocupada de Siria por el ISIS.