El banco holandés DSB, declarado en quiebra
El banco holandés DSB, bajo la tutela del Banco Central de Holanda desde la semana pasada por sus graves problemas de liquidez y solvencia, ha sido declarado este lunes en quiebra por el Tribunal del Distrito de Amsterdam al fracasar su venta a inversores de EEUU.
El Tribunal informó de que el consejo de administración del DSB, así como los administradores designados, “fueron informados de que las negociaciones dirigidas a una compra por parte estadounidense no tuvieron éxito” y argumentó que “el 'plan B' no es viable”, en referencia a un posible rescate público.
“El Tribunal concluye que se ha hecho lo máximo posible para lograr su supervivencia, pero ahora ya no hay perspectivas”, indicó la Corte holandesa, que ha designado al conde Schimmelpenninck y a J. Kuiper como fideicomisarios de la entidad.
El pasado 12 de octubre, el Banco Central de Holanda tuvo que tomar el control de la entidad neerlandesa tras fracasar el intento de rescate por parte de un consorcio de cinco grandes bancos, ING, SNS Reaal, Rabobank, Fortis y Abn Amro.
Las conversaciones con estos cinco bancos fallaron ante la evidente preocupación por pérdidas crediticias y demandas potenciales en su contra, tras anunciar el regulador bursátil holandés una investigación sobre las prácticas prestatarias de la entidad.
Así, el pasado 1 de octubre, una asociación de clientes del DSB recomendó por televisión retirar los depósitos, lo que provocó que los clientes retiraran unos 600 millones de euros en apenas diez días.
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