El Berceo vende sus terrenos
La Fundación Berceo de Logroño ha llegado a un acuerdo con un grupo de empresarios de la construcción para vender los terrenos de sus instalaciones deportivas, en el término conocido como “La Isla”, aunque seguirá en ellas alrededor de cinco años más.
El presidente de esta entidad, Esteban Rubio, ha confirmado la venta de los terrenos, alrededor de 25.000 metros cuadrados, situados en una zona de Logroño situada junto al cuarto puente sobre el Ebro y junto al inicio de la carretera hacia el barrio de El Cortijo.
En esta parcela, ocupada por el Berceo hace 26 años, cuenta con un campo de fútbol de césped natural, una piscina y un frontón cubierto, entre otras dotaciones, a las que tienen accesos 1.250 usuarios. Ya en febrero los dirigentes de la Fundación que gestiona el Berceo explicaron a sus socios que iban a escuchar ofertas por estos terrenos y hace algunas semanas cerraron un acuerdo con un grupo de empresarios, ha admitido el presidente de la Fundación.
Rubio ha eludido citar el número de constructores implicados y el precio pactado por los terrenos, aunque fuentes cercanas a la operación han explicado que supera los cinco millones de euros y que hay cerca de una decena de empresarios implicados en la operación. Las dos partes han acordado que el Berceo permanecerá en estas instalaciones hasta que los planes urbanísticos de la zona se desarrollen por completo, lo que podría tardar unos cinco años.
En estos momentos esta zona está calificada como urbanizable no delimitada y está reservada para que, en el futuro plan general de Logroño, con una densidad media. Según esa calificación ahora podrían construirse unas 15 viviendas -con las alturas que luego se definan- por hectárea, aunque se prevé que en los próximos años esa relación cambie y aumente hasta las 30 ó 40 viviendas.
Mientras se resuelve ese proceso el Berceo definirá por completo el proyecto de su nueva sede, en la que con toda probabilidad renunciará a tener una piscina y también se plantea si dispondrá de campo de fútbol o trasladará a sus equipos a instalaciones municipales.
El presidente de la Fundación ha explicado que “debemos adaptarnos a la realidad de Logroño sin que el Berceo pierda identidad” y eso pasaría por una nueva sede en la que se ofrecieran servicios culturales, sociales y deportivos a sus socios. No obstante se plantean renunciar a instalaciones más costosas en mantenimiento, como el campo de fútbol, y tener otras “asumibles” como pistas de pádel o una polideportiva.
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