El Naturhouse se gusta

El Naturhouse se hizo fuerte en el Palacio (40-27). Se gustó, por momentos. Apretó en defensa, se oxigenó con el contragolpe y Kappelin -renovado la pasada semana- aprovechó la cita para demostrar que cuando está al nivel marca diferencias. Así se puede entender que del 13-10 se diera paso a un tranquilizador 21-11 en poco más de 8 minutos. Tiempo en el que los de Jota González mostraron su mejor versión, la que le ha permitido alcanzar las tres últimas jornadas de liga con el segundo puesto prácticamente en el bolsillo -cinco puntos de ventaja sobre Ademar y 6 sobre Granollers, el cual tiene un partido menos-.

Un parcial avasallador que permitió la tranquilidad durante un segundo tiempo en el que las diferencias llegaron hasta los 15 goles arriba (37-22). Una demostración de que las dos últimas derrotas -Ademar en Asobal y Anaitasuna en Copa del Rey- habían hecho pupa y que no se podía fallar ante un rival al que se respetaba, Villa de Aranda, pero que este sábado no exhibió su mejor cara y que ahora deberá pelear por la quinta plaza.

Y eso que a los locales les costó imponer su criterio. El 3-1 inicial era bueno para sus intereses, pero el conjunto burgalés iba a poner de su parte para dar emoción a la contienda con el 6-5 a los 11 minutos. La ventaja era de un Naturhouse que necesitaba romper el partido, era cuestión de encadenar buenas acciones en ambos lados de la pista. Enfrente, el Villa de Aranda se resistía a claudicar y se mantenía a la expectativa con la intención de seguir a flote.

KAPPELIN CIERRA SU PORTERÍA

Y lo hizo hasta el citado 13-10 (minuto 20). Kappelin contribuyó a que en los siguientes minutos los visitantes se quedaran sin marcar, mientras que el contragolpe y los goles fáciles aparecían con asiduidad. 5 minutos brutales (parcial de 5-0) que dieron continuidad hasta un 21-11 prácticamente inaccesible para el Villa de Aranda. Por si había dudas, el Naturhouse no afoljaba e insistía en lo que le había funcionado para doblar a su oponente en el marcador, 24-12, al descanso.

Con un marcador estratosférico, con un ataque lúcido -24 goles en 30 minutos-, el Naturhouse continuó. No bajó los brazos. Mantuvo esa renta durante un segundo tiempo menos intenso, más propicio para que aparecieran los errores. Pese a ello, los de Jota González hicieron disfrutar a los fieles al Palacio. El 37-22 determinaba que los franjivinos estaban en disposición de acabar la faena y asegurar el segundo puesto. Sin dudas. Sin concesiones a la galería. Javi García y Cadarso se hacían fuertes desde los siete metros, un talón de aquiles desde que Malmagro abandonara la entidad riojana.

Como era esperable, Villa de Aranda dio alguna señal de que no se había ido del partido. Apostó por el intercambio de golpes. No le importó que el Naturhouse alcanzara los 40 goles, ya que la intención era reducir la ventaja y que no fuera escandalosa. El 16-15 del segundo tiempo permitió, por lo tanto, que los arandinos cumplieran durante la última media hora final y equilibraran las fuerzas, puesto que sabían que la derrota había llegado en los diez minutos finales del primer tiempo, cuando Kappelin festejó su renovación por todo lo alto y catapultando a los suyos.

Langaro demuestra que va a más en el ataque de los franjivinos, mientras que los extremos Ángel Fernández y Pedro Rodríguez siguen a lo suyo corriendo y anotando desde los extremos. Garabaya se resarció de la semifinal de la Copa del Rey y dirigió con precisión la defensa. Además, Vigo supo dosificar esfuerzos, el desarrollo del encuentro ayudó, para que la ausencia de Cacheda no se notara. Buena señal para estos tres últimos encuentros de la temporada.

FICHA TÉCNICA

Naturhouse La Rioja: Kappelin (p), Ángel Fernández (7), Langaro (7), Vigo (2), Javi García (5, 1p), Garciandia (2), Pedro Rodríguez (5), Miguel Sánchez (1), Val (5), Luisfe (3), Garabaya, Molina (1) y Cadarso (2,1p).

Villa de Aranda: Rangel (p), Javier Muñoz (3), Oswaldo Dos Santos (2), Revin (1), Peciña (1), Moyano (2), Roberto Sánchez (2), Santana (p), Part (1), Moreira (4), Cakic (6,1p), Nantes, Ramos (2) y Martín (2), Manuel García (1) y Nebreda.

Parciales: 3-1, 6-3, 10-8, 13-10, 18-10, 24-12 (descanso); 26-15, 30-17, 33-18, 36-20, 38-24 y 40-27 (final).

Árbitros: Casado Fernández y Vera Ávila. Excluyeron por dos minutos al local Garciandía y a los visitantes Peciña (2), Revin y Cakic.

Incidencias: 1.200 espectadores en el Palacio.