España afronta el Europeo sin presión

La delegación española que participará desde mañana y hasta el próximo domingo en los Europeos de piscina corta (25 metros), que se disputarán en la localidad húngara de Debrecen, acude a la cita con la esperanza de poder mejorar los resultados conquistados hace un año en Helsinki. España acude a esta cita con once nadadores, liderados una vez más por Eduard Lorente y Erika Villaécija, que en 2006 conquistaron el oro en los 50 y en los 800 metros libres, respectivamente. Ambos fueron los únicos, junto con Mercedes Peris (50 metros espalda), en optar a los podios ya que Villaécija también disputó la final del 440 donde fue sexta.

En esta ocasión, todos los que acuden a la cita tienen la mínima para los Europeos de piscina de 50 metros de Eindhoven (Holanda), por lo que, en opinión del director técnico de la Real Federación Española de Natación (RFEN), Maurizio Cocconi, tendrán “menos presión”. “El objetivo es confirmar las medallas de 2006 y aumentar el número de finales”, añadió el italiano.

Además de Lorente y Villaécija, también destaca la presencia de la veterana Nina Zhivanevskaya, que regresa a una competición internacional de alto nivel después de ser madre en 2005 y estar apartada de las grandes citas. Ahora, la de origen ruso tiene en su mira poder estar en los Juegos de Pekín 2008 e intentará en Debrecen sumar la que sería la séptima medalla (tiene ya un oro y un bronce y cuatro platas) de su palmarés en este tipo Europeos, en los que España posee un total de 26 metales.

En el lado contrario, estará la juventud de Escarlata Bernard, que intentará seguir demostrando su progresión, mientras que la delegación la completan Rafael Muñoz, Aschwin Wildeboer, Javier Noriega y Borja Iradier, en categoría masculina, y Mireia Belmonte, Ángela San Juan y Duane da Rocha, en femenina.