Guti y Benzema acaban con la maldición

El Real Madrid puso punto y final a su nefasta trayectoria en sus visitas a Riazor, después de imponerse por 1-3 al Deportivo de la Coruña, en un partido que añadió galones a los merengues, comandados por la inmejorable versión de José María Gutiérrez 'Guti', artífice de un taconazo de ensueño que sirvió a Benzema para anotar el segundo del encuentro.

Los blancos espantaron las meigas con un partido notable. Sin la presencia del portugués Cristiano Ronaldo, el Real Madrid ofreció otro buen encuentro, como ya hiciera en Mestalla, y se reencontró con la victoria lejos del Bernabéu tres partidos después tras sus tropiezos en Pamplona y Bilbao. El equipo de Manuel Pellegrini minimizó a un Deportivo que había preparado la cita a conciencia y encontró en Guti la solución en el centro del campo. El de Torrejón impartió una nueva cátedra sobre el verde de Riazor y fue uno de los 'culpables' de que se acabar el maleficio coruñés.

Desde la temporada 1992 no salía sonriendo el Real Madrid de Riazor, y este sábado lo hizo con grandeza. Con el halo de equipo reforzado por lo mucho de anímico que tienen estos tres puntos, y por la imperiosa necesidad de sumar tras el triunfo culé por la mínima en El Molinón. El Real Madrid salió desde el inicio con mucha fuerza, con la capacidad para defender desde el balón y con una potencia sobrecogedora en los últimos metros, donde el equipo estuvo casi sublime. Además, el partido sirvió para que Granero se reivindicara una vez más, y para que Benzema se quitara un buen peso de encima.

El 'pirata' fue el autor del primer tanto, que logró de cabeza tras haberla rozado Raúl Albiol. El canterano merengue sacudió los nervios visitantes y los trasladó al bando gallego, que dejó al aire sus carencias defensivas, con Manuel Pablo por el costado izquierdo, a pierna cambiada.

En el centro del campo, el gran Valerón no aguantó más de medio tiempo y pagó muy caro sus pérdidas de balón. Para eso estuvo Xabi Alonso. El tolosarra estuvo de diez y monopolizó el esférico en la medular, donde el Madrid ganó --en buena parte-- los tres puntos.

TACONAZO MÁGICO DE GUTI

Con el 0-1, logrado a los 13 minutos, el partido sólo tuvo un dueño y el Deportivo era tímido en ataque, lastimado por las lesiones de Guardado y Filipe. Y por esa constancia acabó llevando el segundo al fondo de las mallas el cuadro merengue. Una jugada de Guti, de las mejores de la Liga, dejó solo a Benzema con un taconazo de ensueño, casi de película.

El francés marcó el 0-2, dio la tranquilidad al equipo y también a él mismo. Todavía faltaba Kaká para completar la fiesta blanca, y es algo que tendrá que esperar. El brasileño sigue sin rayar el nivel que se esperaba, mientras que el galo completó su noche con el tercero.

El ariete, ex del Lyon, aprovechó un pase de la muerte de Álvaro Arbeloa para sentenciar el envite, sobre todo después del gol de Riki, que recortó distancias desde el punto de penalti. Con el 1-2, los de Miguel Ángel Lotina aumentaron su intensidad, pero no sólo no empataron, sino que vieron cómo los de Chamartín acababan de un plumazo con un maleficio intolerable para un equipo de la talla del Real Madrid.