I love NY
El “sí quiero” fue pronunciado hoy en Nueva York por centenares de parejas homosexuales que contrajeron matrimonio en el primer día de la entrada en vigor de la ley que autoriza en este estado de EEUU el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Numerosas escenas de felicidad, con novias y novios, nerviosos y vestidos con sus mejores galas, y una gran algarabía se vivieron en las diferentes oficinas de Registro Civil de Nueva York, que por primera vez abrieron sus puertas un domingo para casar a 823 parejas, heterosexuales y homosexuales.
Entre enhorabuenas y deseos de felicidad se casaron la reverenda de origen puertorriqueño Carmen Hernández y Doris De Armas, en una ceremonia en El Bronx, uno de los cinco condados de Nueva York.
Hernández, una de las activistas hispanas más conocidas por su defensa de los derechos de la comunidad gay y lesbiana de la ciudad, y De Armas fueron casadas por la juez Yetta Kurland, otra conocida líder de la ciudad en la defensa de los derechos sociales.
“Ha sido un honor casar a Carmen y Doris frente a toda la comunidad de El Bronx”, expresó Kurland en un comunicado de prensa. Phillys Siegal y Connie Kopelow, las dos vestidas con camisa azul y en pareja desde hace 23 años, fueron las primeras en casarse en Manhattan y tras la ceremonia dijeron sentir “una felicidad indescriptible”.
Cuando se supo que los Registros Civiles de Nueva York abrirían este domingo, la alcaldía recibió 2.661 peticiones a través de internet, pero ante la imposibilidad de celebrar todas esas bodas se hizo un sorteo público para elegir a quienes se casarían este día.
Las afortunadas fueron 823 parejas, entre homosexuales y heterosexuales, que participaron en ese sorteo, sin que se sepa cuántas son del mismo sexo porque no se pidió ese dato. El camino para llegar hasta este domingo ha estado precedido de una larga lucha en el Congreso estatal hasta que la ley se aprobó y también de una amplia y costosa campaña de apoyo de organizaciones defensoras de los derechos humanos y las libertades civiles.
Además de las muchas declaraciones de felicidad, en este día también se oyeron las voces de los detractores de estas uniones, como la del senador y reverendo Rubén Díaz, quien convocó una protesta frente a la oficina del gobernador, Andrew Cuomo.
Díaz, también presidente de la Organización de Ministros Hispanos en Nueva York, afirma que aunque la ley ya es una realidad las voces que se oponen no se callarán en su petición de que se consulte la opinión de los electores mediante el voto.
“Cuando los que se manifestaban han empezado a gritar su odio, ha habido un grupo que ha empezado a cantar” una canción religiosa, dijo Patrick Plain, que hoy se casó con Seongman Hong.
Desde el 24 de junio Nueva York es uno de los seis estados de EEUU (Massachusetts, Nueva Hampshire, Vermont, Connecticut y Iowa, además de Washington DC) que autorizan estos matrimonios, una de las conquistas de la comunidad gay cuatro décadas después del incidente del Stonewall (28 de junio de 1969) que dio inicio a su movimiento.
Este día de felicidad para los nuevos matrimonios tampoco ha pasado inadvertido para los comerciantes, que han vendido todo tipo de recuerdos típicos de las bodas hasta en la tienda oficial de recuerdos de la ciudad de Nueva York, donde hay desde los típicos tazones o “mugs” a postales con parejas del mismo sexo que se dicen “Sí queremos”.
Otras muchas parejas no pudieron casarse hoy por diferentes motivos y esperan hacerlo los próximos días o están a la espera de decidir una fecha, como les ha ocurrido al colombiano Farid Alí Lancheros y a George Constantinou. “No sabemos si nos casaremos antes de que nazcan nuestros hijos o después”, dijo a Efe Lancheros, que ya lleva diez años de vida en común con Constantinou y que en noviembre serán padres de gemelos.
La pareja, propietaria de un restaurante en Brooklyn, no se casó este domingo porque el viernes viajaron a Colorado donde la mujer que tendrá a sus hijos se va a someter a una ecografía que revelará el sexo de los bebés y querían estar con ella.
“Los bebés están en camino y hay mucho que planificar para que todo salga bien, pero, estamos muy emocionados” con la nueva ley, dijo Lancheros. Una de las bodas más mediáticas para la ciudad será la que al final del día oficie su alcalde, Michael Bloomberg, que en el jardín de la mansión oficial Gracie casará a dos de sus asesores, John Feinblatt y Jonathan Mintz, con dos hijos y 14 años juntos.
“Para mí Estados Unidos siempre ha sido el lugar de la libertad para practicar las religiones y hacer lo que se quiera, mientras no se ofenda a los demás, y también para que no se impongan religiones, y en este caso se cumplen las dos” premisas, declaró Bloomberg a la cadena ABC.
Las primeras en casarse en el estado fueron Kitty Lambert, de 54 años, y Cheryle Rudd, de 53, que minutos después de la medianoche celebraron su boda en la localidad de Niagara Falls (norte), con las famosas cataratas de telón de fondo y una lluvia de fuegos artificiales.
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