Cruz Roja, cada vez más cerca

La sede Cruz Roja en Logroño ha acogido la Reunión de la Comisión Estatal de Drogodependencias de la entidad. Más de 120 personas de toda España se han dado cita en la capital riojana para participar en las XXVI Jornadas Nacionales de Drogodependencias de Cruz Roja Española.

El lema elegido en esta edición “Cada vez más cerca: desde la asistencia hacia la participación”, quiere poner el acento en la actualización de la formación en materia de drogodependencias y adicciones para mejorar la intervención de Cruz Roja Española en este campo.

De esta forma, el presidente de Cruz Roja en La Rioja, Fernando Reinares destacó que la celebración de estas jornadas coninciden los 26 años de dedicación que esta entidad lleva atendiendo de forma coordinada a quienes tienen dificultades para llevar una vida normalizada por culpa de droga. Y esto no hubiera sido posible sin el compromiso personal de cientos y cientos de profesionales y voluntarios de Cruz Roja que han ayudado a llevar una vida mejor a estas personas“.

Por su parte, el doctor Hernández apuntó que la atención a las personas drogodependientes ha sido y es uno de los puntos nucleares de la acción social de Cruz Roja Española; a finales de los años 70 y principios de los 80, cuando muy pocos querían asumir la atención a las personas que sufrían los efectos de la droga, Cruz Roja fue pionera en la atención a este colectivo.

Según este especialista, “hace unos años el problema de la droga estaba entre los problemas que más preocupaban a los españoles en los sondeos de opinión. Y sin embargo, aunque en la actualidad ha descendido mucho ese nivel preocupación social, los programas de atención a drogodependientes siguen siendo absolutamente necesarios”. En esta línea ha adelantado que Cruz Roja atendió en 2012 a 30.000 drogodependientes y desarrolló más de 100.000 acciones de sensibilización.

El facultativo, Gregorio Martín, perfiló algunas líneas del plan estratégico de la institución para los próximos años: “queremos salir de los centros, acercarnos más a la población, abrir nuestras sedes a espacios de participación ciudadana, pero todo ello sin olvidarnos de la asistencia”.

Así, explicó que las necesidades de los pacientes han cambiado han cambiado en estos últimos veinte años. “Hace unos años nos basábamos más en los programas de reducción de daños y ahora tenemos que centrarnos en otros aspectos, como son la mejora de la calidad de vida de los pacientes y de sus familias”.