Vendrán lluvias

En febrero de este año, la ex-ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, visitó Logroño para dar cuenta de las actuaciones que se estaban ejecutando para la recuperación de cauces y márgenes de los ríos de La Rioja.

Presentó un proyecto con un presupuesto de más de 2.800.000 euros para la región, de los cuales, 710.000 euros correspondían a la capital riojana. Respecto a este último, se apuntaba que, hasta ese momento, se había actuado en la margen derecha (desde el Puente de Sagasta hasta la pasarela peatonal y desde la Plaza de Toros hasta Riojaforum) y en la margen izquierda (desde el Puente de Sagasta hasta la zona de las antiguas piscinas).

También se señalaba que durante la ejecución de los trabajos, se habían realizado retiradas de residuos sólidos urbanos y vegetales (retirada de especies invasoras y de árboles muertos) y se habían iniciado las plantaciones.

Lo cierto es que cualquiera que disfrute con el paseo del Parque del Ebro, sobre todo desde la pasarela peatonal, puede apreciar cómo se acumula la basura en los márgenes del río. Una hecho que, desde luego, desluce bastante el camino, dado el entorno natural privilegiado del que disponemos todos los logroñeses.

Antes incluso de las últimas inundaciones en la margen izquierda del Ebro, ya se veían troncos en la ribera. Con las intensas lluvias de junio, algunos maderos (los más cerrados o que habían formado familia) se quedaron aquí, pero otros muchos se los llevó el agua y se fueron de vacaciones a la orilla de Mequinenza. Otros quisieron ir más allá y ver mundo y decidieron visitar la Expo de Zaragoza, aunque sólo fuera de paso.

Las últimas inundaciones aun dejaron más residuos y la basura se va acumulando en la ribera del Ebro de Logroño. Ahora no nos preocupa mucho, porque bastante tenemos con aguantar este sofocante calor, pero ¿qué pasará cuando vuelva a llover con intensidad?. El agua cada vez tiene menos sitio y, desde luego, seguro que encuentra una salida. ¿Por dónde? Eso ya lo veremos.