Medidas a escala planetaria
«Del mismo modo que la salud y el bienestar se consideran aspectos determinantes de la paz y la seguridad», ha declarado Margaret Chan, Directora General de la OMS, «la salud y el bienestar de las poblaciones deben convertirse en la medida que determine el impacto del cambio climático y nuestros esfuerzos para hacerle frente con eficacia».
La Organización Mundial de la Salud nació del compromiso internacional para establecer la paz y la seguridad en todo el mundo. Sesenta años más tarde, ese mismo sentido de vulnerabilidad y solidaridad reúne a la comunidad internacional con el fin de hacer frente a la creciente amenaza del cambio climático para la seguridad de la salud pública.
El cambio climático ocupa una posición cada vez más importante entre las prioridades internacionales, como ha puesto de manifiesto el Premio Nobel que acaba de otorgarse al ex Vicepresidente de los Estados Unidos, Al Gore, y a un equipo de expertos de las Naciones Unidas por la labor realizada al respecto. Hoy en día, cada vez es más evidente que el desarrollo sostenible propicia los ambientes saludables y mejora la salud pública.
«El personal sanitario está al frente de la lucha contra las repercusiones del cambio climático. Las poblaciones más vulnerables son las de los países cuyo sector sanitario ya está luchando para prevenir, detectar, controlar y tratar enfermedades y afecciones tales como la malaria, la malnutrición y la diarrea. El cambio climático pondrá de relieve y exacerbará esas deficiencias al ejercer con mayor frecuencia nuevas presiones sobre la salud pública.»
«Es preciso que situemos la salud pública en el centro de la agenda sobre el cambio climático», ha agregado Chan. «Ello incluye la movilización de los gobiernos y otras partes interesadas para que colaboren en el fortalecimiento de la vigilancia y el control de las enfermedades infecciosas, la utilización segura de unos suministros de agua que disminuyen, y la acción sanitaria en las emergencias.»
Con ocasión del Día Mundial de la Salud 2008, las comunidades y organizaciones de todo el mundo celebrarán actividades encaminadas a aumentar el grado de sensibilidad y comprensión de la población con respecto a las consecuencias del cambio climático en la salud, y de mostrar el impacto que la creciente interdependencia entre esas dos esferas tiene en las decisiones y políticas a escala nacional e internacional.
0