Tercera ronda de contactos el lunes y el martes para poner fecha a la investidura de Díaz Ayuso

El presidente de la Asamblea de Madrid ha convocado para el próximo lunes y martes la tercera ronda de contactos con los portavoces de los grupos parlamentarios para proponer a Isabel Díaz Ayuso como candidata a la investidura. Los líderes vuelven a reunirse con Juan Trinidad (Ciudadanos), que constatará oficialmente que la candidata del PP, tras el acuerdo con Ciudadanos y Vox, reúne los apoyos suficientes para ser investida. Tras los encuentros, Trinidad pondrá fecha al pleno, que debe ser entre tres y siete días después.

Trinidad se reunirá el lunes con Unidas Podemos (11:00), Vox (11:30) y Más Madrid (12:00) y el martes con Ciudadanos (11:00), Partido Popular (11:30) y Partido Socialista (12:00).

Con estos plazos, la investidura quedará relegada a las semanas centrales de agosto. Los partidos manejan dos posibilidades: o bien el jueves y viernes de la semana que viene (8 y 9); o bien el lunes y el martes de la siguiente (12 y 13), unos días antes del puente del 15 de agosto.

En el PP, que por un lado quiere resolver cuanto antes la formación de Gobierno, ven con cierta preocupación que el evento con el que la derecha pretende hacer una demostración de poder y mostrar su capacidad de consenso quede enterrado por las vacaciones veraniegas.

Será la tercera vez que Trinidad se reúna con los portavoces. La primera vez, Díaz Ayuso no contaba con los apoyos ni de Vox ni de Ciudadanos y estos últimos pidieron “tiempo” al presidente para cerrar el acuerdo con los conservadores. Trinidad decidió entonces convocar una investidura sin candidato. La decisión generó críticas por parte de los partidos de izquierda y especialmente del PSOE. Su candidato, Ángel Garrido, era el que más apoyos reunía y no fue propuesto echando mano de un nuevo artículo del Reglamento que da la posibilidad de convocar un pleno sin nadie a quien investir.

Unos días antes de este pleno, Trinidad volvió a convocar otra ronda in extremis en lo que se entendió un modo de presionar a Vox para que se posicionara. El presidente fue criticado por la izquierda, acusado de poner las instituciones al servicio de los intereses de su partido. En ese momento, PP y Ciudadanos ya habían firmado un acuerdo de gobierno con programa y reparto de carteras. La extrema derecha no cedió en ese momento y la hoja de ruta siguió como estaba previsto: el primer intentó de investir a Díaz Ayuso fracasó. Ahora, con todos los apoyos atados, Trinidad vuelve a convocar a todos los partidos sin incertidumbres sobre quién será propuesto aunque aún con la fecha sin cerrar.