El Orgullo Crítico lleva a las calles toda su rabia contra la ultraderecha y el capitalismo rosa
Cientos de personas salieron ayer a las calles del Centro para revindicar un Orgullo LGTBI más combativo y alejado de los intereses comerciales del capitalismo rosa y alzar su voz contra el ideario racista y LGTBIfóbico de los partidos de extrema derecha.
Los cerca de 40 grados a la sombra no frenaron a un nutrido grupo de colectivos LGTBIQ+ diversos que ondearon sus banderas para reivindicar su existencia y lanzar un claro mensaje: “El Orgullo no se vende, se defiende” y no es una fiesta, sino una reivindicación.
Encabezados por la asociación Asociación de Familias de Menores Transexuales Chrysallis, partieron en torno a las 19:20 horas desde la plaza de Jacinto Benavente para terminar en la Plaza de Pedro Zerolo, un rincón del barrio de Chueca con un especial significado para el colectivo porque está dedicado al activista LGTBI y político socialista Pedro Zerolo.
Esta cita del 28 de julio, que se consolida en el calendario como una alternativa a MADO (el Orgullo organizado por AEGAL-COGAM-FELGTB), tenía este año una especial significación al conmemorar los 50 años de los disturbios ocurridos en bar Stonewall.
La mecha de rabia que prendió el levantamiento contra la represión que sufría ese local de ambiente con continuas redadas por parte de la policía neoyorquina. Desde Orgullo Crítico animan a recuperar ese espíritu combativo que supuso el inicio del activismo LGTBIQ+, hoy opacado por intereses comerciales del capitalismo rosa y por el pinkwashing.
Como un ejemplo de diversidad heredero de esos disturbios del Stonewall, cada uno de los bloques de la manifestación: menores y familias trans, bolleras, personas no binarias, asexuales, trans, bisexuales, trabajadoras del sexo, migrantes... todos marcharon al grito de “Nos manifestamos, no desfilamos” para dejar muy claro que el Orgullo no es un desfile, sino una herramienta de lucha, como cualquier otra manifestación.
Cada uno de estos colectivos portó pancartas con mensajes específicos de sus demandas, para hacerse visibles tal y como son y decir a la sociedad que no piensan bajar los brazos hasta que no acaben con las discriminaciones, la LGTBIfobia y la falta de derechos para todes.
“Abascal, capullo, no nos toques el Orgullo”
Porque si algo quedó claro en esta manifestación que hay tantas identidades de género y orientaciones sexuales como personas y que no están dispuestos a aceptar las propuestas de los partidos de extrema derecha como Vox “Abascal, capullo, no nos toques el Orgullo”, fue el mensaje más coreado por los manifestantes.
También hubo hueco para otros mensajes para quienes se escandalizan o que niegan la existencia del colectivo LGTBI, como “La celebres o la censures la diversidad existe”, “Pene con pene, que no te apene. Vagina con vagina, que no te deprima”, “Normal es un programa de lavadora”, “Detrás de las ventanas hay lesbianas” o “Detrás de los balcones hay maricones”.
El colectivo trans, al grito de “No es disforia, es euforia” y “Mi documentación no admite discusión”, pidió la despatologización de la disforia de género (término médico con el que se les clasifica para poder iniciar la transición hacia el género sentido) y la derogación de la ley de identidad de género del 2007.
Al llegar a la Puerta del Sol la Plataforma de Encuentros Bolleros reivindicó la visibilidad lésbica y antirracista, porque en el ambiente LGTBI también hay machismo y racismo. Mientras se lanzaban al aire botes de humo de color morado varias mujeres racializadas tras la pancarta “Bloque bollero. Existimos y resistimos” comenzaron a gritar “Abran las fronteras, queremos más bolleras” para llamar a atención del público general.
Convencidos de que la esencia reivindicativa del Orgullo se ha diluido con lo comercial y se ha vaciado de contenido para transformarse en un gran botellón patrocinado por grandes marcas comerciales en el que unos pocos hacen negocio a costa del colectivo LGTBI y multinacionales y partidos políticos desfilan con sus carrozas, tampoco faltaron en la manifestación proclamas contra MADO.
En el Orgullo Crítico no abundan los estereotipos de hombre cis, gay y blanco, sino todo un amplio catálogo de cuerpos diversos e identidades de género y orientaciones sexuales que no están lo suficientemente representados en el Orgullo tradicional y que reivindican su derecho a ser, a sentir y a existir.
0