Casi 12.000 viajeros afectados cada día en Madrid por las incidencias de Cercanías
Casi 12.000 viajeros se ven afectados cada día por incidencias en la red de Cercanías Madrid. En 2017 se registraron 4.330, la mitad provocadas por averías en los trenes, según los datos a los que ha accedido eldiario.es. Esos fallos diarios empiezan a despuntar en algo más grave, según los sindicatos y los expertos: “un problema de movilidad en la Comunidad de Madrid”.
“El servicio ha sufrido un deterioro paulatino y evidente, solo imputable a una mala planificación a la inversión en material rodante. La joya de la corona ya ha pasado a la historia. Las situaciones son esperpénticas”, denuncia Manuel Nicolás, secretario general del sector ferroviario de CCOO. El año pasado sufrieron problemas 13.580 trenes, tuvieron que trasbordarse 430 y se suprimieron 2.600, lo que se tradujo en más de 4 millones de viajeros afectados, según las cifras analizadas por este medio.
La red transporta a diario a cerca de 700.000 personas, según cifras del Ministerio de Fomento, para los que hacer un trayecto en el tiempo estimado se ha convertido en una lotería. “Conocemos a estudiantes que no han llegado a exámenes importantes, a vecinos que han perdido sus citas médicas, a trabajadores que han sido amonestados por retrasos...”, cuenta Rafael Sánchez, alcalde de Pinto, uno de los municipios que esta semana se ha reunido con el Ministerio de Fomento. La línea que pasa por la localidad tiene una frecuencia de 15 minutos, la menor de la red.
Motivo de las incidencias y averías en la red de cercanías de Madrid (2016-2017)
Las averías más recurrentes están provocadas por fallos en las puertas de acceso, en el autopropulsado o en los frenos, por este orden. Un tren chocó a finales de diciembre con el tope de la vía en la estación de Alcalá de Henares por un “fallo mecánico” que provocó dos heridos graves y 11 moderados.
Un gran volumen de incidencias, casi la mitad, están relacionadas con “causas externas”, según los datos a los que ha accedido eldiario.es. La más habitual es que algún viajero active la alarma en los trenes, pero también computan en este recuento los actos vandálicos, los arrollamientos, los obstáculos en la vía o las condiciones meteorológicas adversas.
Estas son las principales incidencias en la red de cercanías de Madrid (2016-2017)
Renfe defiende, al respecto, que sus trenes mantienen una puntualidad superior al 90% en todas las líneas. La empresa admite que las “que se han visto mayormente afectadas por las recientes averías e incidencias” son la C-3 y la C-4. Por eso, argumenta, están recibiendo “inversiones de 10.373.720 euros y 7.758.160 euros, respectivamente”. Según los datos que ha facilitado a eldiario.es, las causas de impuntualidad son “imputables” en el mayor porcentaje a Adif, encargada de todo lo relacionado con la infraestructura viaria y dependiente de Fomento.
Un viajero sufre una incidencia en el tren que coge una de cada 50 veces, según los cálculos de este medio. La tasa de usuarios afectados fluctúa pero no existe una tendencia a la mejora pese a que los años más duros de recortes ya han pasado. No se aprecia en los datos de 2016 y tampoco en los de 2017: por cada 100.000 usuarios, entre 1.500 y 2.500 se ven afectados en sus trayectos.
Este momento, probablemente el de más proyección pública de las deficiencias de Cercanías, ha sido el elegido por el presidente de Renfe para anunciar que revisará los precios del billete en esta red y en media distancia. Lo dijo el pasado 15 de enero, aunque diez días después le ha desmentido el ministro de Fomento. “No se van a subir los billetes de Cercanías. En Renfe no hay ningún plan para subir el billete de Cercanías”, aseguró Iñigo De la Serna en la comisión del ramo.
Evolución de la ratio mensual de incidencias por cada 100.000 viajeros (2016-2017)
Las quejas recurrentes y públicas de los usuarios han obligado al Ministerio de Fomento a tomar medidas. En el último mes, representantes de la cartera se han reunido con el Gobierno de Cristina Cifuentes, que reconoce deficiencias y exige una solución, y con alcaldes de varios municipios. Su compromiso es aún vago pero tiene una fecha marcada: marzo de 2018. En dos meses, Fomento tiene que aprobar un plan especial para recuperar el servicio de Cercanías, sobre el que todavía no ha concretado ni medidas ni inversión ni plazos de ejecución.
Entre que sí se se pusieron sobre la mesa con los regidores municipales están, por ejemplo, la activación de un sistema que permite convertir las vías en tránsitos de doble sentido para que los trenes con problemas no hagan tapón. De esta manera, si hay un convoy averiado en una vía, los siguientes pueden desplazarse por la contigua momentáneamente para superar el obstáculo y que no se acumulen retrasos por efecto dominó.
El plan incumplido de 2009
También, como explica a eldiario.es el alcalde de Pinto, se abrió la posibilidad de instalar un sistema de señalización que permite aumentar la frecuencia de los trenes sin necesidad de duplicar las vías, lo que era la idea inicial y ahora se ha descartado. “La música suena bien, pero queremos verlo plasmado en un documento, ver la dotación, los años de ejecución... Sabemos que esto no se soluciona en un mes, pero no queremos que se repita lo que pasó con el plan de 2009, del que falta mucho por cumplir”, apunta el regidor Rafael Sánchez.
Doblar el número de vías en la C-3 (que pasa por Pinto) y la C-8 era una medida prevista en el Plan de Cercanías de 2009 pero no se ha cumplido casi una década después. El plan, presentado por el exministro socialista José Blanco en la última etapa del Gobierno de Zapatero con una inversión 5.000 millones de euros, incluía también la ampliación de Cercanías hasta el aeropuerto y de otras estaciones como Soto del Real o Mirasierra. La primera funciona; la segunda, no, pese a estar construida.
“Tenemos un problema estructural. El sistema de transportes que mueve más gente no recibe la inversión que merece. El dinero que se dedica a esta infraestructura no es proporcional al número de viajeros. El AVE es el que se lleva la mayor parte, el 70%” , analiza Isidro Barqueros, especialista en políticas públicas de transporte en Ecomovilidad.net.
Según el proyecto de Presupuestos Generales del Estado de 2017, el Gobierno destinó 4.471 millones de euros al ferrocarril (sin diferenciar AVE y convencionales), de los cuales 334 fueron a Cercanías y proximidad (solo un 7,47% del total), según datos de Fomento. El Ministerio de Hacienda, que realiza un cómputo distinto, habló de 3.056 millones, un descenso del 29,2% respecto al año anterior.
Los expertos también llaman la atención sobre el “peligro” de que otros servicios “colapsen” por las incidencias de Renfe, como Metro. “No puede absorber la presión que le introduce la red de Cercanías. Por ejemplo, si hay una avería en Entrevías, la gente se baja y coge el metro; o en Atocha, o en Nuevos Ministerios. Este servicio lógicamente no está preparado para asumir una demanda instantánea de 20.000 viajeros”, desgrana Barqueros.
