Las alquiladoras abogan por una multimodalidad sostenible y por normativas homogéneas
La Federación Nacional de Alquiler de Vehículos con y sin Conductor (Feneval) ha aprovechado su cita anual con los principales actores de la movilidad, que se realiza tradicionalmente en fecha prenavideña, para hacer pública su posición sobre diversas novedades normativas introducidas recientemente que afectan a su sector.
La que más celebra es la definición de la movilidad como un “derecho social de toda la ciudadanía” que reconoce el texto del Proyecto de Ley de Movilidad Sostenible aprobado por el Consejo de Ministros el 13 de diciembre, solicitud que ya se recogía en las alegaciones presentadas por la patronal de las alquiladoras el pasado mes de abril.
La propia visión general que recoge el texto legal merece el elogio de Feneval en la medida en que augura textualmente evolucionar “de la ciudad de los coches a la ciudad de las personas”. A este respecto, desde la entidad se aboga por que, entre la multimodalidad existente, sea el ciudadano el que elija el método de transporte más conveniente y sostenible para el recorrido que necesite realizar en cada momento, haciéndolo asequible y accesible para él.
El presidente de Feneval, Juan Luis Barahona, ha insistido en la tradicional petición del sector referente al IVA. El rent a car, a su juicio, es el pionero de la movilidad compartida y por ello debe tributar, como el resto de los servicios de este tipo, al 10%. “Hacerlo al 21% contraviene el espíritu de la ley de incentivar los servicios de movilidad como alternativa al vehículo motorizado privado”, ha afirmado.
Barahona ha pedido también que se reconozca de manera explícita en la norma la obligación legal de ofrecer un coche de sustitución al ciudadano de similares características al suyo propio cuando este sea el perjudicado de un siniestro. “La aplicación efectiva de esta medida ya está establecida en la vigente regulación, en concreto en la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones, y de forma reiterada por distintas sentencias judiciales, pero parece necesario que se reconozca literalmente en la Ley, para que este derecho se vea aplicado realmente por las aseguradoras”, ha explicado.
En su balance del 2022, el presidente de la patronal de las alquiladoras ha aludido a otras normativas que afectarán al sector durante el próximo año, como la Ley de Cambio Climático nacional y las autonómicas. De la de Valencia en concreto, recientemente aprobada, ha señalado que impone unas cuotas obligatorias de vehículos 0 emisiones a las compañías del sector, así como un nuevo impuesto a las emisiones de los vehículos, “sin haberse llevado a cabo ningún estudio que justifique cómo esa medida contribuye a la sostenibilidad medioambiental”.
Barahona asegura compartir los objetivos de la norma en cuanto a la búsqueda de una movilidad cada vez más sostenible, pero ha recordado que, tal como está planteado el calendario, para 2023 ya un 9% de los vehículos adquiridos deben ser eléctricos en la comunidad, hasta alcanzar el 100% en 2035. “Esto podría incidir muy negativamente en nuestra actividad y, por tanto, en la buena marcha del sector turístico”, indica.
El responsable de Feneval demanda además una regulación más realista a la hora de cumplir las exigencias ambientales de Bruselas. “Es innegable el esfuerzo de la industria del automóvil para conseguir una movilidad sostenible, pero es necesario un impulso en el desarrollo de una red de infraestructura de recarga óptima, pues debo recordar que, según el Barómetro de Electromovilidad de Anfac, España se encuentra aún muy por debajo de la media europea, en el tercer lugar por la cola”, precisa.
Por último, Barahona reclama una mayor coordinación y homogeneidad normativa entre todos los actores de la movilidad, entre los que menciona a las empresas de rent a car, los ciudadanos, las compañías energéticas, los fabricantes de automóviles, la DGT, Aena, Adif y los gobiernos locales, regionales y central. “Esta es una cadena de valor nueva y muy compleja, y de la voluntad y coordinación de todos depende su éxito”, ha manifestado.
Previsiones para 2023
En cuanto a los resultados anuales, el sector del alquiler de vehículos estima cerrar 2022 con una facturación aproximada de entre 1.500 y 1.600 millones de euros y con más de 121.000 vehículos matriculados entre turismos e industriales, según datos de MSI. En 2023, espera recuperar los niveles de facturación anteriores a la pandemia, cuyas restricciones de movilidad provocaron caídas de hasta el 90% en destinos turísticos como Baleares o Canarias.
Ante la escasez de vehículos para alquilar como resultado de la actual crisis de suministros, Feneval insiste en la necesidad de que las marcas de automóviles mantengan el 20% del total de las ventas a su sector. “Hemos pasado de contar con más de 800.000 vehículos en circulación en la temporada alta en 2019 a unos 600.000 el pasado verano”, ha recordado Barahona.
“Y para abastecernos de flota -ha concluido- tuvimos que multiplicar las conversaciones con los fabricantes para tener conocimiento sobre los plazos de entrega, renegociar los contratos de buyback para tener los vehículos hasta 10 meses o más, además de retrasar el defleeting, asumiendo el coste financiero que supone, e incluso en algunos casos hemos tenido que importar coches”.
