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La crisis del coronavirus no pasa factura al Gobierno de Navarra

María Chivite habla con el secretario general de Podemos Navarra, Eduardo Santos, y la líder de Geroa Bai, Uxue Barkos

Rodrigo Saiz

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Al Gobierno de Navarra formado por el PSN, Geroa Bai y Podemos le ha tocado vivir a pocos meses de su constitución una de las mayores o la mayor crisis que tendrá a lo largo de la legislatura. Una crisis que solo acaba de empezar y que ya ha puesto a prueba la fortaleza y cohesión de un recién formado Ejecutivo por tres formaciones distintas. Hasta la fecha, lejos de las tensiones que se han visto en otros gobiernos de coalición de otras comunidades, el Ejecutivo foral ha mantenido la unión para sacar adelante medidas que ayuden a la población a minimizar los costes de la pandemia.

A diferencia, por ejemplo de Euskadi, donde han sido muy visibles las discrepancias entre los dos socios de Gobierno -PNV y PSE-, que incluso las han exhibido en público, a escasos kilómetros en la Comunidad Foral, esos mismos socios -PSN y Geroa Bai- han mantenido un mensaje unitario en la gestión de la crisis, también apoyado por la tercera pata del Ejecutivo, Podemos. Una unión que se traduce en los acuerdos alcanzados tanto en materia sanitaria como económica y política que han permitido al Gobierno encabezado por la socialista María Chivite aprobar ya tres decretos de Ley Foral con medidas como la contratación de personal sanitario, la creación de un fondo de 100 millones de euros para los costes de la crisis o ayudas a los autónomos como la aprobada este mismo miércoles en la sesión del Gobierno de 2.200 euros para aquellos que hayan tenido que cesar su actividad por el coronavirus, o de hasta 800 para los que, habiendo seguido con su actividad, hayan visto como sus ingresos se reducían drásticamente.

Uno de los motivos de la unión que ha mostrado el Gobierno desde que comenzó la pandemia puede ser la reciente negociación de presupuestos, que finalizó a finales del pasado mes de marzo con la aprobación de las cuentas en la Cámara foral con el apoyo de EH Bildu. Para alcanzar ese acurdo fue necesaria una larga y dura negociación con la formación abertzale, tras una primera puesta en común de las tres formaciones del Ejecutivo para sacar adelante un proyecto de presupuestos. Una tarea en la que se comenzó a trabajar al poco de formarse el gobierno y en la que PSN, Geroa Bai y Podemos cedieron para consensuar un proyecto común.

Ese mismo espíritu se ha visto en el Gobierno durante esta crisis del coronavirus. A la hora de aprobar medidas importantes tanto en el ámbito sanitario como en el económico se ha buscado el consenso de los tres partidos que forman el Gobierno, que en equipos interdepartamentales han detallado las medidas a tomar. Prueba de ello son los tres decretos de Ley Foral que ya ha sido aprobados desde marzo y que recogen medidas de importante calado como un fondo de 100 millones de euros para la gestión de la crisis, la contratación de personal sanitario y sociosanitario (de residencias) de refuerzo o ayudas para autónomos como los 2.200 euros para aquellos que hayan tenido que cesar su actividad. Unos paquetes de medidas, que tal y como ha informado este mismo viernes la presidenta María Chivite han supuesto un gasto al Gobierno de 109 millones de euros desde que comenzó la epidemia, a los que habrá que añadir otros 25 millones que el Ejecutivo foral estima que costarán las ayudas a los autónomos.

Para el Gobierno, que tiene minoría parlamentaria, será importante mantener la cohesión durante los próximos meses en los que le tocará hacer frente a la crisis económica que se avecina tras la pandemia. El Producto Interior Bruto de Navarra (PIB) ha caído ya un 9%, lo que obligará al departamento de Economía y Hacienda encabezado por Elma Saiz hacer un reajuste en las previsiones iniciales de ingresos. Para ello será esencial mantener la unidad mostrada hasta ahora para que las discrepancias no hagan más difícil todavía conseguir la mayoría del arco parlamentario necesaria para aprobar las medidas.

Esa unión del Ejecutivo incluso se ha trasladado al Parlamento foral donde, más allá de algunas críticas por parte de Navarra Suma hacia la gestión de la crisis del Gobierno en algunos aspectos, todas las medidas presentadas han sido aprobadas por la mayoría de la Cámara.

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