Pamplona abre la segunda etapa de EH Bildu en medio de los ataques de la derecha a los socialistas

Pamplona volverá a tener un alcalde de EH Bildu cinco años después. En el día de los Santos Inocentes, Joseba Asiron, quien ya fue regidor entre 2015 y 2019, volverá a ser investido alcalde, pero en esta ocasión merced a una moción de censura inédita pactada con el PSN para desalojar a UPN de la principal institución que gobierna la derecha en Navarra. También forman parte del acuerdo Geroa Bai (Socialverdes y PNV) y Contigo/Zurekin (Podemos, IU y Batzarre), que a diferencia de los socialistas sí que entrarán en el nuevo equipo de gobierno.

La moción, que se debatirá en un pleno municipal que comenzará a las 12 del mediodía, ha supuesto un nuevo terremoto político en España por el paso que ha dado el Partido Socialista de apoyar por primera vez una candidatura de la izquierda abertzale. UPN, el principal partido de la comunidad foral, ha anunciado que rompe relaciones con el PSN, partido que lidera el Gobierno de Navarra, una coalición de los socialistas con Geroa Bai y Contigo/Zurekin liderada por María Chivite. Junto a los regionalistas, PP y Vox, se concentraron el pasado domingo 17 de diciembre en la plaza Consistorial de Pamplona para condenar la moción y asegurar que el PSN entrega “Pamplona a los terroristas de EH Bildu”. Asiron, que llegó a la alcaldía en 2015 como independiente en las listas de EH Bildu y sin experiencia previa en política, firmó en 1998 un manifiesto de condena por el asesinato del concejal de UPN Tomás Caballero por parte de ETA.

En las últimas horas, UPN ha convocado a la ciudadanía a una nueva concentración frente al Ayuntamiento este jueves a las 12 del mediodía, hora a la que comenzará el pleno en el que se debatirá la moción. Esta convocatoria coincidirá con una de EH Bildu, formación que ha pedido a sus simpatizantes que acudan a la misma plaza a “celebrar el comienzo de un nuevo tiempo”. Ante el riesgo de que se genere un clima de confrontación en la plaza Consistorial, Asiron ha pedido a través de un vídeo publicado en la red social X (antigua Twitter) que la jornada se desarrolle con “respeto, sosiego y alegría”. “Mañana muchos ojos estarán puestos en nuestra ciudad. Miradas propias y miradas ajenas. Miradas cercanas y miradas lejanas. Pero todas ellas queriendo transmitir su propio punto de vista. Es nuestra oportunidad para transmitir la mejor de las imágenes de la ciudad y en ello os pido que penséis cuando al filo del mediodía llegue el relevo en la alcaldía”, ha enfatizado.

Dentro del Consistorio, la moción de censura saldrá adelante pese a que contará con un voto menos de los inicialmente previstos, el del quinto concejal del PSN, cuyo escaño estará vacío tras la renuncia de Tomás Rodríguez, número seis en la lista, que iba a sustituir a Elma Saiz tras ser nombrada ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Los socialistas arguyen motivos personales, pero a la vez responsabilizan a UPN de la renuncia por los “ataques” que aseguran han recibido los ediles socialistas por parte de la formación regionalista y de la propia alcaldesa, Cristina Ibarrola. Desde UPN, sin embargo, aseguran que su renuncia se debe, al igual que la de la siguiente en la lista, María José Blasco, quien ha rechazado el cargo por incompatibilidad con su trabajo, a que no quieren investir a un alcalde de EH Bildu.

Con todo, el éxito de la moción de censura está garantizado. Contará con 15 votos a favor, los de EH Bildu, PSN, Geroa Bai y Contigo/Zurekin, y 11 en contra, los de UPN y PP. Asirón volverá a recibir la vara de mando con la que liderará un Gobierno municipal del que formarán parte los dos concejales de la coalición de Socialverdes y PNV, así como el único representante de Contigo/Zurekin.

No estará en el equipo municipal ningún concejal socialista, si bien como ha explicado el propio Asiron, el PSN “es conocedor” del acuerdo pactado con las dos otras formaciones. EH Bildu y PSN, además, firmaron el pasado 13 de diciembre un acuerdo en el que recogían varios compromisos para los próximos tres años y medio de legislatura, entre los que se encuentra el “reconocimiento y reparación de las víctimas generadas por la violencia de ETA” o “el fomento y difusión” del euskera, entre otros.

Con la moción, los socialistas derribarán su último muro con la izquierda abertzale, con quienes hasta la fecha mantenían una línea roja de no negociar un acuerdo de Gobierno. EH Bildu gobernará Pamplona gracias al apoyo del PSN, al igual que María Chivite gobierna en Navarra por el respaldo, aunque en forma de omisión, de la coalición abertzale, con la que también pactó los cuatro presupuestos de la pasada legilslatura.