Sr. Feijóo, reconozca la gestión económica del Gobierno
Feijóo y su muchachada no dejan de sorprenderme. Después de darnos la tabarra con los mil y un desastres que se nos caerían encima tras la aprobación de la reforma laboral, resulta que ahora, pelillos a la mar, la susodicha reforma no estaba tan mal. Es un reconocimiento implícito de que el único que, dentro del PP, no se equivocó con su voto fue Alberto Casero. Siempre mantuve que los ciudadanos de bien de este país debemos estar profundamente agradecido al señor Casero. Gracias a su voto permitió sacar adelante una reforma laboral que ha mejorado las condiciones de vida de miles de sus conciudadanos. Por eso, debemos mostrar siempre nuestro profundo reconocimiento y agradecimiento a este patriota de bien.
Ahora que vamos cogiendo confianza, señor Feijóo, le recomiendo que el acto de contrición vaya un pelín más lejos. Dé un paso adelante y reconozca el buen hacer del gobierno de coalición en materia de inflación y crecimiento. Nuestra inflación está ya por debajo del 2% en tasa interanual, la única del área Euro que cumple con el objetivo del BCE. Reconozca que la excepcionalidad ibérica del mercado eléctrico, que usted no votó, ha funcionado, y exija que no sea temporal, sino permanente. Pero además, presione a quienes mal dirigen el Banco Central Europeo y aféeles su comportamiento extemporáneo. Además de no entender las causas de la inflación actual, el daño que esas subidas de tipos de interés, innecesarias tanto para el actual episodio inflacionista como para la realidad patria, provocan en nuestras familias jóvenes es demoledor. Les empujará a muchas de ellas a desahucios y miseria. Por cierto, señora Calviño, no se puede confiar en las buenas prácticas de la banca, y mucho menos de un sector bancario que a fecha de hoy es un oligopolio que induce un problema de riesgo moral a las autoridades económicas: demasiado grandes para quebrar. Es necesario crear ya un parque público de viviendas en alquiler masivo.
Las claves del buen hacer
La actividad económica en nuestro país va a una velocidad de crucero razonable, creciendo entre tres y cuatro veces más que nuestro entorno. Pero si nadie lo remedia todo ello se torcerá. Fíjese usted, señor Feijóo, el gobierno de coalición socialcomunista, con el apoyo de los separatistas, ha conseguido que nuestra economía crezca de manera vigorosa, y sin inflación. Muestre su alegría por ello y absténgase de manipular los datos. Nuestro PIB será revisado fuertemente al alza en el período 2020-2022, de manera que la coartada de que nuestro PIB no ha superado el nivel previo a la Covid no se sostiene. Pasa igual con el intento de sus mariachis de manipular los datos de empleo, que son tan buenos que ni siquiera usted asume que los mejorará, al prometernos un número de afiliados a la Seguridad Social alrededor de los 22 millones, lo que supone generar la mitad de afiliación de lo acontecido bajo el gobierno socialcomunista. No permita que sus adláteres mientan con los datos de empleo y hagan un totum revolutum usando medidas alternativas a la tasa de paro convencional, U4. Me refiero a las medidas de tasa de paro U6 y U7 a las que a veces recurren, sin saberlo por cierto, y que añaden precariedad y gente fuera del mercado laboral y que alcanzaron el máximo histórico bajo la batuta Rajoy.
Las claves de la buena situación absoluta y relativa de la economía española, además de lo ya señalado, hay que buscarlas en la relajación presupuestaria; en la financiación que ha ido haciendo, y todavía hace, en mercado secundario, el Banco Central Europeo a los distintos Tesoros europeos, en lo que supone la aplicación de algunos de los principios de la Teoría Monetaria Moderna. Por eso, señor Feijóo, ahora que parece usted sincerarse, haga un acto de contrición adicional y no tenga miedo a usar el gasto público como motor de crecimiento económico. No se le ocurra implementar una consolidación fiscal. Defienda que el BCE continúe financiado a los Tesoros europeos en los mercados secundarios. Porque si nadie frena la policy mix que tanto desde Frankfurt (BCE) como desde Bruselas (Comisión Europea) aparentemente se nos quiere imponer, España entrará en recesión en 2024. Ello también va por usted, señor Sánchez, porque posiblemente ganará las elecciones generales tras el esperpento reaccionario que nos ha ofrecido el tándem Vox-PP en tan solo unas pocas semanas.
Ah, se me olvidaba, señor Feijóo, a modo de postdata, muestre su orgullo por las subidas salariales, que además de favorecer el crecimiento económico, no están afectando la productividad de las empresas. Y deje de decir que el Estado debe comportarse como las familias porque, y mire que se lo he comentado ya más de una vez, no está sujeto a las mismas restricciones. Para ello ponga a su equipo económico a reciclarse, y que estudien las balanzas sectoriales de Wynne Godley. Entenderán, por ejemplo, que la capacidad de financiación de nuestra economía se encuentra en la actualidad en uno de sus mejores momentos de nuestra historia reciente, de manera que nuestra deuda pública está fundamentalmente en manos de ahorradores españoles. Y eso, se lo garantizo, es una notica excelente.
Espero no haber sido pretencioso, y mucho menos grosero, pero el deseo, que espero sea compartido, de ver mejorar las condiciones de vida de nuestros conciudadanos, especialmente de los más desfavorecidos, es lo que me ha motivado, ahora que usted parece recular en alguna materia, a exigirle un poco más. Pero, por si acaso, y sin acritud, espero verle en el banco de la oposición, al menos otros cuatro años más. Nos jugamos mucho, y si bien no me fío de casi nadie, de ustedes mucho menos.
13