Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

Lo que las urnas esconden

Los candidatos a las andaluzas en un debate televisivo

Rodolfo Irago

Este nuevo tiempo político de incertidumbres en el que vivimos provoca que la apertura de unas urnas se convierta más que nunca en un oráculo para intentar saber lo que está por venir. Señales de humo para no perderse en el camino.

En las europeas de 2014 estalló el fenómeno Podemos y se precipitó el fin del bipartidismo. Las dos elecciones generales de 2015 y 2016 confirmaron el nuevo equilibrio inestable entre cuatro partidos y las catalanas de hace un año catapultaron a Ciudadanos hasta provocar el efecto óptico de que los de Rivera ya estaban desembarcando en Moncloa. Después llegó la sentencia de la Gürtel, la moción de censura, la caída de Rajoy y la presidencia de Pedro Sánchez.

Este domingo se abren otras urnas, las andaluzas y por el nerviosismo y la alta tensión que se respiran, pueden marcar la política española de los próximos meses. El despacho de San Telmo parece lo de menos, más que nada porque es lo único que se da por hecho: que lo seguirá ocupando Susana Diaz aunque veremos con qué apoyos.

Eso sí, es muy relevante saber cómo será la victoria del PSOE, si se mantiene cerca del 35% de los votos de hace 3 años o si hay un desgaste apreciable. En la Moncloa harán cálculos para intentar saber que votos tendría Sánchez en el fortín andaluz en unas generales adelantadas a febrero o marzo.

Otro dato fundamental para intuir si tendremos generales pronto es conocer el grado del batacazo que auguran todas las encuestas para el PP. Si queda, aunque sea solo por un voto, por detrás de Ciudadanos, la aluminosis de la sede de Génova amenazaría ruina.

Las urnas nos dirán también si el neoandalucismo de izquierdas de Teresa Rodríguez al frente de Adelante Andalucía ha funcionado después de haber reducido a la mínima expresión la presencia e influencia de Pablo Iglesias en la campaña. Teresa Rodríguez intentará cobrarse la cabeza de Susana Diaz aunque seguramente al final la deje gobernar en minoría para tratar de seguir erosionándola.

Pero sin duda, la gran incógnita de este 2D es si la ultraderecha de Vox irrumpe por primera vez en un Parlamento regional español. Todos los demás parecen remar a su favor hablando a todas horas de ellos, pero es la extrema debilidad del PP andaluz lo que les da más gasolina. Según las encuestas, el 50% de sus votantes vienen de las filas populares y el 70% son hombres; un dato para analizar con calma.

Si la participación es baja, tienen opciones de lograr hasta 4 escaños. Sería la bomba de la jornada y rompería la excepción española que hasta ahora mantenía disimulada a su extrema derecha entre las filas del PP. De esas filas salió por cierto después de ser acogido por Esperanza Aguirre, el líder de Vox, un Santiago Abascal que amenaza ahora con volar solo abriéndole otro boquete al barco semihundido de Pablo Casado a quien algunos ya animan a presentar una moción de censura a Sánchez para intentar resucitar después del domingo. Se acaba la campaña en la que se le pidió el voto hasta a una vaca pero el espectáculo debe continuar.

Etiquetas
stats