La cumbre de América del Norte se celebrará a finales de junio en Canadá

Canadá, Estados Unidos y México celebrarán su tradicional cumbre de Norteamérica a finales de junio en Canadá, con un año de retraso sobre el calendario original, informó hoy la radiotelevisión pública canadiense CBC.

CBC señaló que la cumbre, a la que asistirán, además del primer ministro canadiense, Justin Trudeau, los presidentes de México, Enrique Peña Nieto, y Estados Unidos, Barack Obama, servirá para que este último pronuncie un discurso ante el Parlamento canadiense poco antes de abandonar la Casa Blanca al término de su segundo y último mandato.

El discurso de Obama en el parlamento canadiense se podría producir el 29 ó 30 de junio, inmediatamente después de la conclusión de la cumbre.

Trudeau invitó a Obama a visitar Canadá y pronunciar un discurso ante las dos cámaras del Parlamento canadiense durante la visita de Estado que realizó a Washington en marzo pasado.

El último presidente de EEUU que se dirigió al Parlamento canadiense fue Bill Clinton en 1995.

La cumbre que celebran los tres socios del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), tenía previsto tener lugar en 2015, pero el anterior primer ministro canadiense, el conservador Stephen Harper, la suspendió en dos ocasiones.

Aunque oficialmente la razón de la suspensión fue el calendario electoral canadiense, los expertos han señalado que la verdadera causa de la cancelación fueron las malas relaciones que Harper mantenía tanto con Obama como con Peña Nieto.

Durante su periodo de gobierno, Harper presionó a Washington para conseguir que aprobara el oleoducto Keystone XL, que debía transportar crudo canadiense a Estados Unidos, e incluso llegó a amenazar a Estados Unidos si la administración Obama no aceptaba el proyecto, cuya construcción fue finalmente rechazada.

Harper también mantuvo tensas relaciones con México tras imponer en 2009 de forma inesperada el requisito de visado de entrada a los ciudadanos mexicanos.

Aunque el Gobierno canadiense dijo que la medida era temporal y que se debía al elevado número de peticiones de refugio procedentes de México, Harper mantuvo durante todo su mandato las restricciones a los ciudadanos mexicanos.

Trudeau se ha comprometido a eliminar el visado de entrada a los mexicanos aunque no ha especificado cuándo se producirá.