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PSOE y Unidos Podemos presentan su reforma para eliminar el voto rogado: papeleta en blanco y más tiempo

Los grupos parlamentarios buscan alternativas al voto rogado

Cristina Armunia Berges / Irene Castro

Los grupos parlamentarios del PSOE y de Unidos Podemos han presentado este viernes una propuesta para acabar con el actual sistema de voto rogado -aprobado por PP y PSOE en 2011- y sustituirlo por un proceso con menos trabas burocráticas y plazos que se puedan cumplir. Acabar con la duplicación de los trámites administrativos del mecanismo actual, eliminar los escasos márgenes de tiempo y que aumente la participación, son los objetivos de la iniciativa. El objetivo final, que el voto rogado se sustituya antes de los comicios de mayo.

Para ello, proponen el uso de una papeleta en blanco con la que, según indican, se adelantarán los plazos de envío de la documentación electoral antes de la proclamación de las candidaturas y de la resolución de las impugnaciones. Una de las principales protestas que se repiten una y otra vez desde la fecha de la reforma es precisamente esta, que muchas veces las papeletas no llegan a tiempo para ser reenviadas por correo.

“Se trata de responder a las demandas de la colectividad española en el exterior y suprimir el requisito de que los españoles residentes en el extranjero tengan que solicitar o rogar el voto, lo que permitirá que todos reciban la documentación en su domicilio”, dicen en la primera parte del documento ambos grupos parlamentarios.

La reforma también propone que se amplíe de tres a siete días los plazos para el depósito del voto en la urna consular y mantiene la posibilidad de enviar el voto por correo a la Oficina Consular. En muchas ocasiones, los residentes en el extranjero viven a cientos de kilómetros de estas oficinas y no pueden personarse los días designados.

Finalmente, sí que se mantiene el sistema de identificación de los votantes que se introdujo con la reforma de 2011. Es decir, seguirá siendo obligatorio incluir en el sobre dirigido a la Junta Electoral una fotocopia del DNI o del Pasaporte.

La reforma garantiza también que todo el proceso sea gratuito. Según indica el texto de la modificación, para ello se habilitarán apartados de Correos que permitan el envío sin costes de la documentación a las Oficinas Consulares de Carrera y Secciones Consulares de Misión Diplomática. En los lugares en los que no se pueda abrir estos apartados de Correos, se hará lo que sea necesario para garantizar la devolución del dinero gastado por el elector.

“Esta duplicación de trámites [para rogar el voto] ha de realizarse en un escaso margen de tiempo, lo que, unido a la dependencia de los servicios de correos extranjeros, dificulta el cumplimiento de los plazos previstos en la normativa electoral e impide el ejercicio de este derecho fundamental a un número muy elevado de ciudadanos”, argumentan en su propuesta, que ha sido enviada a la Mesa del Congreso y solicitan que sea tramitada de urgencia.

El objetivo tanto del PSOE como de Podemos es acabar con la reforma de 2011 que incluye el voto rogado (pactada por PP y PSOE) antes de las próximas elecciones europeas y autonómicas del 26 de mayo.

Este miércoles, por su parte, el Partido Popular también presentó una propuesta para acabar con el voto rogado introduciendo más centros de votación en urna en el extranjero e incidiendo en que se garantice la identificación del votante por correo y evitar los “pucherazos” de hace décadas, dijo la diputada Ana Belén Vázquez.

Los conservadores plantean que el elector pueda descargarse por Internet un modelo de certificado acreditativo para ser identificado y que se puedan descargar también las papeletas sin esperar a la proclamación oficial de las candidaturas.

Fuentes del partido de Albert Rivera tienen claro que hay que acabar con el voto rogado, pero el sistema de la papeleta en blanco no termina de convencerle. “En Ciudadanos estamos empeñados en acabar con el voto rogado y que esa reforma entre en vigor en las próximas autonómicas. Pero la propuesta con la que se ha trabajado en la subcomisión nos suscita dudas en dos puntos: la papeleta en blanco, sobre todo en el senado, por cómo puede afectar a las únicas candidaturas abiertas; y sobre las garantías de identificación del votante”.

La formación cree que estas dudas deben ser resueltas por la Junta Electoral Central porque es “el órgano técnico que se pronuncia sobre estos temas, el órgano técnico que luego tendrá que resolver posibles reclamaciones y vamos a ver qué pasa en la tramitación”.

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