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Veinte años de trayectoria de Laura Torrado, en la Sala Canal Isabel II

Veinte años de trayectoria de Laura Torrado, en la Sala Canal Isabel II

EFE

Madrid —

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“La oscuridad natural de las cosas”, en la Sala Canal de Isabel II, repasa veinte años de la trayectoria de la artista madrileña Laura Torrado a través de fotografías, vídeos, dibujos e instalaciones.

Incluida en la Sección Oficial de PhotoEspaña 2013, la exposición muestra las diferentes vías en las que se desarrolla el trabajo de esta artista, cuya base es fundamentalmente escultórica, según comentó a Efe el comisario Mariano Navarro.

El planteamiento de “La oscuridad natural de las cosas” responde a un análisis teórico del trabajo de Laura Torrado (Madrid, 1967) y a la adecuación de este discurso a los particulares espacios de la Sala Canal de Isabel II, ubicada en un antiguo depósito de agua.

Rompiendo un discurso cronológico, Mariano Navarro ha planteado una introducción en la que se muestra el abanico de posibilidades con las que trabaja Torrado y un recorrido en ascenso por las diferentes plantas de la sala. “Cada planta responde a una franja de su trabajo, por lo que pueden ser leídos como partes autónomas. Los motivos que le han interesado se entrecruzan”,aduce.

El denominador común de este recorrido es una obra en la que la artista fija la atención en la representación, a veces personalizada en sí misma, de actitudes y situaciones que cuestionan los estereotipos establecidos sobre la idea del género, “y a la vez, descifra las distintas modalidades del afecto. Se centra en el avatar humano y en sus relaciones privadas y con la sociedad”.

Mariano Navarro considera que Laura Torrado no es una fotógrafa. “Es una artista que se ha servido de bases escultóricas para desarrollar un trabajo que se despliega en el dibujo, la instalación, el vídeo o la instalación sonora”.

El comisario, que sigue desde hace años el trabajo de esta creadora, ha situado, en los cubículos independientes que en la planta baja se abren al centro del recinto, un ejemplo de las diferentes modalidades de la obra de Laura Torrado.

Estas abarcan desde propuestas basadas en la escultura, como las flores de porcelana que forman parte de la serie “Vida suspendida”, hasta el vídeo, el dibujo, la instalación o la fotografía.

Con el título “Yo y yo misma”, en la primera planta se muestran fotografías y vídeos en los que la protagonista es la propia artista. En dos de las fotografías más antiguas, fechadas en 1994, Laura Torrado rinde homenaje a las artistas Rebecca Horn y Louise Bourgeois, que, aunque de diferentes épocas, coincidieron en la nueva formulación de una cultura de género, según el comisario.

En su opinión, el conjunto de piezas reunidos en este espacio pueden dividirse en dos grandes grupos: el de las que se incluyen en la “escenografía del rostro” y las que lo hacen en “la dramaturgia del sujeto”.

“Cuentos” ha denominado el comisario la segunda planta, en la que las piezas exhibidas comparten el universo de lo narrativo “bien sea desde su propia propuesta, sea ésta seria o cómica, bien sea introduciendo en lo visible el verbo de los escritores o la lectura escenografiada de sus textos”.

Laura Torrado está presente en algunas de estas piezas, pero no en todas ya que ha contado con modelos, actores y actrices para protagonizar sus fotos y vídeos.

Continuando el ascenso, el visitante llega a la planta tercera en la que con el título “Representaciones” se muestran dos series fundamentales, “El dormitorio” y “Hammam”, ambas de 1995.

“Son, para mí, de las obras más intensas de la artista y constituyen un simpar contrapunto entre dos universos de existencia de la mujer”, afirmó el comisario, para quien en “El dormitorio” se dilucida a la vez que se escenifica un círculo afectivo que incluye la estirpe del sentimiento amoroso materno, protagonizado por abuela y nieta.

En “Hammam”, en el escenario de una pescadería, una serie de mujeres desnudas se muestran estáticas, solitarias e independientes “y ni siquiera cruzan una mirada entre ellas”, comentó el comisario de la exposición, que, con el patrocinio de la Comunidad de Madrid, permanecerá abierta hasta el 4 de agosto.

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