Felipe González defiende que el 155 se tenía que haber aplicado hace cinco años
“Si lo hubiéramos aplicado hace cinco años, el coste de lo que ha ocurrido y de lo que está ocurriendo hubiera sido infinitamente menor”. Con esas palabras se ha referido este viernes el expresidente del Gobierno Felipe González a la aplicación del artículo 155 en Cataluña. Una excepcionalidad que, de haberse realizado antes, también hubiera beneficiado “incluso a los que se han saltado el Estatuto, la Constitución, el ordenamiento jurídico y el interés general”, ha dicho, en referencia a las fuerzas independentistas catalanas.
González ha participado en Madrid en el homenaje que ha realizado la Asociación para la Defensa de los Valores de la Transición al también expresidente Adolfo Suárez. Un acto en el que el socialista ha defendido el valor de la política a la hora de enfrentar asuntos como el del independentismo en Cataluña. Defensor de la descentralización del Estado, González ha alertado de que se ha producido una “centrifugación”, y ha asegurado que para evitarla “hay que limitar la deslealtad institucional” que, a su juicio, han promulgado los dirigentes catalanes. Siempre, ha insistido, desde la política y no desde la judicialización del conflicto.
“Si se produce la deslealtad institucional, por favor, los que tienen la responsabilidad de gobernar, antes de acudir a los jueces, hagan política incluyendo la aplicación del 155”, ha recalcado, antes de recordar que Suárez afrontó el nacionalismo catalán con múltiples conversaciones con el expresident Josep Tarradellas. “Eso es hacer política”, ha remarcado. En esa línea, ha lanzado un dardo a los actuales dirigentes españoles al advertir de que “no hay que ampararse en los jueces para no asumir la responsabilidad de la política”.
“Yo me siento orgulloso de ser parte del régimen del 78, de haber ayudado en lo que pude al desarrollo de la Transición, al pacto constitucional y sigo siendo reformista y creo que hay que ser reformista”, ha defendido, tras reivindicar la reforma de la Constitución en su conjunto. Porque, en su opinión, “hay que darle oxígeno” a la convivencia de los españoles “con un proyecto”. En ese sentido, ha considerado que el problema de Cataluña se resolverá cuando se tenga claro “para dónde vamos a ir como España. Para tenerlo claro hay que saber en qué momento ese coche que no iba mal se salió de la curva. Porque solo un proyecto de España ilusionante va a recomponer lo que se ha medio roto” en Cataluña.
Previamente, González se había pronunciado acerca de la decisión de la dirigente de ERC Marta Rovira, de no comparecer hoy ante el Supremo y de huir de España. El expresidente socialista considera que el gesto de la política independentista es un “acto de insolidaridad” porque “acelera la penalización del resto de los procesados” por rebelión y que hoy han comparecido ante el juez Pablo Llarena en el Alto Tribunal. “El que se fugue justifica mucho más que se decreten prisiones por riesgo de fuga”, ha justificado.
Aunque no ha llegado a criticar las actuaciones de la justicia española contra políticos independentistas, González sí ha abogado por que el Estado de derecho sea “extraordinariamente garantista” en la aplicación de la Constitución, para así “tener una superioridad sobre el secesionismo y la ruptura de quienes han violado el Estatuto, la legalidad constitucional y las reglas del juego”. A su juicio, “mientras más violen esas leyes, más garantistas tenemos que ser, más escrupulosos en la aplicación de las reglas”, ha zanjado.