No es casualidad que Pablo Iglesias Posse fuera tipógrafo. No es casualidad que alguien habituado a leer en el último tercio del siglo XIX en España fundara primero un sindicato socialista y después el primer partido marxista español, el PSOE. Lo hizo el 2 de mayo de 1879, hace 140 años, cuando España acababa de vivir su primera –y breve– experiencia republicana y se adentraba en el turnismo del liberalismo doctrinario y limitado de la Restauración. Escribe Andrés Gil.