Wall Street abre a la baja y el Dow Jones cede un 0,22 por ciento

Wall Street abrió hoy a la baja y el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, cedía un 0,22 % en el inicio de una semana clave sobre el futuro de los tipos de interés en Estados Unidos y pendientes del petróleo.

Media hora después del inicio de contrataciones ese índice restaba 37,54 puntos hasta 17.227,67 unidades, el selectivo S&P 500 perdía un 0,18 % hasta 2.008,65 enteros y el índice compuesto del mercado Nasdaq bajaba un 0,14 % hasta 4.926,52 unidades.

Los operadores en el parqué neoyorquino se decantaban por las ventas moderadas en el arranque de una semana clave para el futuro de los tipos de interés ante la reunión de dos días de la Reserva Federal (Fed), que comienza mañana martes.

El comité de mercado abierto de la Fed, encargado de la política monetaria del país, concluirá este miércoles su última reunión del año y la mayoría de los analistas prevén que anuncie la primera subida de las tasas de interés desde que estalló la crisis de 2008.

Los mercados también estaban pendientes de la evolución del precio del petróleo, que iniciaba la jornada con pérdidas del 1,35 % en el caso del barril de Texas, que cotizaba a 35,14 dólares, y del 2,87 % en el caso del crudo Brent, que cotizaba a 36,84 dólares.

Los sectores en Wall Street arrancaban la sesión divididos entre los descensos del energético (-0,57 %), el de materias primas (-0,42 %) y el tecnológico (-0,22 %) y los avances del financiero (0,25 %) o el industrial (0,13 %).

La química DuPont (-3,79 %) lideraba las pérdidas en el Dow Jones por delante de Apple (-1,71 %), Chevron (-0,76 %), Boeing (-0,71 %), Caterpillar (-0,57 %), UnitedHealth (-0,28 %), General Electric (-0,21 %) o Microsoft (-0,20 %).

Al otro lado de la tabla encabezaba las ganancias la aseguradora Travelers (1,11 %) por delante de Walmart (0,96 %), Walt Disney (0,93 %), Nike (0,82 %), Home Depot (0,82 %), Goldman Sachs (0,75 %), Procter & Gamble (0,63 %), 3M (0,59 %) o Visa (0,55 %).

En otros mercados, el oro retrocedía a 1.971,8 dólares la onza, la rentabilidad de la deuda pública a diez años avanzaba al 2,191 % y el dólar perdía terreno frente al euro, que se cambiaba a 1,0996 dólares.